"Los artistas visuales debemos dejar al Consejo de las Artes la batalla con el poder político"
Joan Fontcuberta (Barcelona, 1955) es el primer fotógrafo que asume la presidencia de la Asociación de Artistas Visuales de Cataluña (AAVC). Galardonado con el Nacional de Fotografía en 1998, es conocido por sus proyectos singulares, en los que reconstruye la realidad para denunciar las manipulaciones del poder. Acaba de publicar Historias de la fotografía española (Gustavo Gili), serie de textos de corte "militante y no académico". Fontcuberta abrirá su exposición Blow up Blow up en la galería Àngels, el 28 de febrero, mientras hasta el 8 de ese mes sigue abierta su retrospectiva en La Virreina de Barcelona.
Pregunta. ¿Qué hará en la AAVC?
Respuesta. Será una presidencia de continuidad, que se valdrá de la experiencia de mi predecesor Ignasi Aballí, vicepresidente junto con Daniel García Andújar. Pero la puesta en marcha del Consejo de las Artes marca otra etapa. Hasta ahora, la AAVC ha tenido que desempeñar un papel de guardián del ecosistema artístico. Han sido relaciones difíciles, hasta ásperas y marcadas por una actitud beligerante. Ahora que el Consejo asumirá algunas de sus acciones, la asociación, sin dejar de ser reivindicativa, podrá ser más propositiva. La AAVC debe desvincularse de la batalla y el Consejo, encargarse de velar por la situación.
"El edificio Imagina no reúne las condiciones para ser un museo"
P. ¿Qué le parece la composición del Consejo de las Artes?
R. Estamos satisfechos: no ha sido una selección ideológica, el grado de competencia es indiscutible y el sector de las artes visuales está bien representado, aunque no haya ningún creador. También es cierto que se lo propusieron a Aballí y a mí, pero lo rechazamos. Es posible que algunas disciplinas, como música y danza, necesiten más representación, pero ahora lo importante es que arranque; los defectos ya se pulirán.
P. ¿Cree que la crisis del Centro de Arte Santa Mónica se resolverá pronto?
R. Se resolverá positivamente. Tengo confianza en el consejero Tresserras y en su inteligencia y actitud. Es consciente de su equivocación y buscará una solución que no cause demasiado estropicio político ni a él ni al Gobierno y que satisfaga al sector.
P. Tresserras anunció que la sede del nuevo centro de arte que asumirá el papel del Santa Mónica será el edificio Imagina de Mediapro. ¿Qué le parece?
R. La noticia se difundió tras la comparencia de Tresserras, para contrarrestar mediáticamente la imagen de la soledad del consejero en el Parlament. Como sede no nos convence. Además de haber sido una decisión sin debate previo, el edificio no reúne las condiciones de un centro de arte, ni sus elementos identitarios. Sin contar la inversión que requiere un espacio que, al ser de alquiler, tiene un carácter temporal.
P. El Código de Buenas Prácticas indica que los directores de museos deben ser nombrados por concurso. Sin embargo, los que se han realizado hasta la fecha estaban más que cantados...
R. Estaban cantados, pero no amañados. Si eres positivo como yo lo soy, eso ya es un avance desde el nombramiento a dedo. El concurso es un instrumento democrático y como tal tiene pros y contras, pero es una mejora.
P. Se acusó a la AAVC de no ser suficientemente representativa del sector...
R. La asociación es un amalgama heterogénea, reúne a un millar de miembros, pero hay poca comunicación entre ellos. Queremos crear espacios de diálogo en red y encuentros virtuales más frecuentes. Hay que identificar los nexos comunes y los problemas de los socios para saber cómo podemos serles útil.
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