_
_
_
_

La muestra 'Villancico' pone fin a los actos del centenario de Laxeiro

Las obras pertenecen a la colección del Museo de Pontevedra

Tras doce meses dedicados a la difusión de la figura de Laxeiro en Galicia con un intenso programa de actividades, la Fundación que lleva el nombre del artista cierra la conmemoración de su centenario con una exposición que muestra, por primera vez en Vigo, cuatro obras singulares que, en la actualidad, son propiedad del Museo de Pontevedra. Piezas que, de nuevo, remarcan la importancia de José Otero Abeledo, Laxeiro (Lalín, 1908-Vigo, 1996) en la renovación de la plástica gallega del siglo XX, a la que supo incorporar las tendencias en boga en la Europa de su tiempo y que ya se exhiben en la sede de la Fundación, en la Casa das Artes.

La más delicada es el mural Villancico, que se utiliza como título de la muestra, y cuyas características técnicas hacen de su traslado una operación delicada no demasiado aconsejable. El panel fue realizado en 1962 por encargo del propietario de la Galería Velázquez de Buenos Aires, Luis Álvarez, amigo personal de Laxeiro desde que, en 1951, el pintor lalinense participara en una colectiva de artistas gallegos que supuso su carta de presentación en la capital argentina. Por iniciativa de los galeristas Víctor Montenegro y Jaime Trigo, la pieza fue trasladada a Galicia a comienzos de la década de los noventa desde su ubicación original. Ése fue su primer viaje, el segundo la trae a Vigo hasta comienzos de 2009.

Laxeiro pintó en 1962 'Villancico', por encargo de una galería bonaerense

El Laxeiro que confecciona el mural retoma uno de sus temas recurrentes, el mundo de la infancia, con una disposición que evoca la secuencialidad de la imaginería religiosa medieval y el horror vacui del barroco rural gallego. Villancico es, además, una completa actualización de sus postulados. A la querencia por lo sobrenatural y los acabados próximos a lo escultórico que marcaron su "estética granítica", añade los parámetros del Art Brut y el primitivismo y la inspiración espontánea enarbolados por el grupo Cobra.

De unos años antes, 1954, data otra de las piezas en exhibición. Se trata de Chegada do Rei Breogán a Galicia, composición que refleja los momentos finales de su primera época, fascinada por la cultura popular, el exceso y el cromatismo terroso, aquí emparentados con la temática mitológica. El comportamiento de la luz es el trazo más característico del pintor expresionista que inscribe O espanto (1962) en la tradición del negrismo europeo que bebe de Goya y de Valle Inclán. Por último, la fantasía Palacio de nácar (1976) es anticipo de su cubismo orgánico.

Mostrar al público más cercano las facetas heterogéneas de Laxeiro, que de modo sintético se concentran en esta muestra recién inaugurada, era uno de los objetivos principales de la celebración de su efemérides. Una tarea realizada en tres direcciones (divulgación, programación e investigación) que se va a seguir promoviendo desde la Fundación "para la difusión de Laxeiro en el exterior, en España y en Europa", afirma su director, Javier Pérez Buján. Se prepara ya una muestra sobre las ilustraciones de Laxeiro para febrero de 2009, año en el que se publicará el proyecto editorial de Nova Galicia Edicións, Catálogo Universal Razoado, bajo la dirección de Antón Pulido.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_