Grandes grupos confían en lograr un tercio de lo subastado

La cuenta atrás del concurso eólico no sólo da para sobresaltos, críticas y quinielas entre los principales pretendientes. También para tirar de calculadora y formular conjeturas sobre las adjudicaciones sobre el total de potencia solicitada, que multiplica por más de diez los 2.325 megavatios a repartir. En muchos casos, los grandes grupos que optan al concurso estiman que una concesión por debajo de un tercio de la potencia que figura en sus proyectos no colmaría sus pretensiones. Los planes industriales planteados en las solicitudes, y sobre todo, las inversiones comprometidas, también se verían mermadas finalmente en función de lo que reciban.

Unión Fenosa, uno de los grupos que más aspiraciones tiene, al solicitar junto a su socio Enel más de 1.000 megavatios (con Gas Natural suma 1.816), considera que si logra la adjudicación final de 300 megavatios "sería una buena noticia". Fuentes de la eléctrica dan por hecho de que la vinculación a Galicia y, sobre todo, la implantación de su red, inclinarán la balanza hacia sus propuestas. En medios del sector se estima que, por lo general, no habrá concesiones superiores a los 100 megavatios.

Traslado de Ence

Expectativas similares tienen los promotores del traslado de Ence fuera de la ría de Pontevedra. Los empresarios Manuel Jove, Jacinto Rey y Epifanio Campo, que han presentado también propuestas individuales, optan a través de Inverabán Gestión de Inversiones a 638,6 megavatios, a repartir en 19 parques. El compromiso es cerrar el ciclo de papel con una nueva planta, a instalar en el norte de Galicia. De acuerdo con fuentes de la Administración, y según el borrador de la propuesta de resolución que maneja la subcomisión de Innovación, serán entre 250 y 300 los megavatios que finalmente recibirá esta propuesta. Es decir, menos de la mitad de lo solicitado. La incógnita reside en saber si invertirán entonces menos de lo previsto, unos 450 o 500 millones de euros, en el traslado de Ence. Fuentes de Industria señalan simplemente que el decreto tiene su pliego de condiciones, que el traslado de la factoría es un compromiso en firme de la Xunta, y que intentarán favorecerlo con los medios a su alcance.

De la dimensión de las peticiones da idea la alta concentración de propuestas en los mismos emplazamientos: cuatro grupos plantean ofertas por el doble del total de la potencia a repartir. Tres de los consorcios presentaron solicitudes para llevarse más de 1.000 megavatios: Unión Fenosa; Norvento, participada por la familia lucense Fernández Castro y Caixa Galicia, Energías de Portugal y Endesa.