Eroski y sus 50.500 dueños

Cuando la firma de distribución Eroski compró Caprabo, en junio de 2007, no sólo dio un salto en dimensión geográfica y de ventas, sino que también se propuso dar el espaldarazo a su modelo cooperativo con sede en el País Vasco extendiéndolo a todas las sociedades del grupo. El próximo 17 de enero se celebrará la asamblea general para que 50.500 trabajadores se conviertan en propietarios del grupo. Cuando esto ocurra, será la primera cooperativa del mundo por socios, afirma un portavoz de Eroski. Todos serán trabajadores y propietarios en un periodo de dos años, según cálculos de la dirección del grupo cooperativo.

"En la actualidad, más de 13.000 trabajadores son accionistas y comparten con nosotros su pertenencia al proyecto más de 350.000 consumidores", dicen fuentes de Eroski, que recuerdan que, en la asamblea general, el 50% es representante de los trabajadores, y el otro 50%, de los consumidores.

La asamblea del próximo 17 de enero tomará la decisión estratégica

Eroski afronta la crisis de consumo con una marca propia fuerte

Para los directivos del grupo cooperativo, Eroski es hoy un modelo empresarial capaz de caminar sin sufrir los rigores de la crisis económica, la exigencia de los accionistas que persiguen la rentabilidad a corto plazo y los vaivenes de los mercados bursátiles. El pasado año, las ventas del grupo de distribución ascendieron a 7.624 millones de euros, con un beneficio de 207 millones. Para este año, con el consumo en pleno frenazo, la estimación es de una ligera progresión en superficie comparable.

Eroski distribuye sus resultados económicos anuales con el objetivo de fortalecer la capacidad de decisión de sus trabajadores como accionistas activos de la empresa. Además de destinar la mitad de los beneficios a reservas para fortalecer sus cuentas, los trabajadores accionistas se asignan el 40% de los beneficios anuales, de modo que, sumados al 50% de reservas, amplían un gran caudal para la reinversión permanente.

Una vez que el trabajador deja de formar parte del proyecto, cuando se jubila, recoge la cuantía de sus beneficios asignados y acumulados durante el periodo activo en la empresa. Se completa el 100% de los beneficios con el 10% que se revierte directamente a la comunidad, a la sociedad, en cometidos relacionados con los ciudadanos en su condición de consumidores.

En 2007, Caprabo es adquirida y entra a formar parte de Eroski, dándole al proyecto una nueva dimensión e incorporando más de 15.000 nuevos trabajadores, un tercio del total. La decisión estratégica vigente para este periodo, que va desde 2005 a 2008, de promover una fórmula de participación en la propiedad, en los resultados y en la gestión de todos los trabajadores de Eroski, se convierte en un nuevo reto para la cooperativa.

El objetivo del modelo es ofrecer a los trabajadores asalariados la oportunidad de ser accionistas y propietarios. Representa igualar derechos económicos, sociales y políticos a todos los trabajadores del grupo. "En la actualidad compartimos Eroski desde la sociedad matriz, que es cooperativa, con sociedades anónimas en las que la cooperativa es socio mayoritario", recalca un portavoz.

Con su naturaleza jurídica de sociedad anónima, los trabajadores de las mismas son contratados a cuenta ajena y comparten a la vez su gestión profesional con compañeros de trabajo que, por su condición de accionistas, pueden ser identificables como patronos. "Con esta propuesta que ahora se abre perseguimos ganar coherencia y simplificación", señala Constan Dacosta, presidente de Eroski. "Queremos remarcar un atributo diferencial y competitivo como es comprometer a las personas en un proyecto profesional y vital. Y lo queremos hacer con la participación de todos los trabajadores en los resultados. Así somos más a compartir, y seguro que somos mejores profesionales y personas", añade Dacosta.

Esta fórmula participativa representa cambiar la actual configuración societaria de Eroski. Será necesario crear un ámbito cooperativo dentro de Eroski. Así, el Grupo Eroski adoptará una estructura de empresas vinculadas a través de la participación en todas ellas de la cooperativa Eroski en su condición de sociedad matriz. La clase de cooperativa de la sociedad matriz es la de consumo, y la del resto de empresas será la de cooperativa mixta de trabajo asociado. El conjunto de las cooperativas del grupo constituirá una cooperativa de segundo grado que actuará como vértice del grupo.

Eroski afronta la crisis del consumo con una marca propia fuerte y un área de frescos de calidad. En ventas, el gran salto se ha dado al añadir las de la red de tiendas de Caprabo, ya incorporada a las cuentas. El fuerte patrimonio inmobiliario es otra de las fortalezas del grupo. Así, Eroski acaba de vender 12 hipermercados en España por un importe total de 361 millones de euros que le garantizarán los resultados económicos de este año, a la vez que la venta tiene carácter estratégico.