Pujol rechaza el referéndum de Mas si se recorta el Estatuto

Artur Mas no recibe apoyos a su idea de convocar un referéndum en caso de que el Tribunal Constitucional (TC) mutile el Estatuto. En cambio, sí recibe fuego amigo. Primero fue el secretario general de CiU, el democristiano Josep Antoni Duran Lleida, quien desechó la idea -y luego sumó al Partit del Socialistes al carro de la unidad-, y ayer fue el ex presidente de la Generalitat Jordi Pujol quien cuestionó la conveniencia de convocar a los catalanes a las urnas en respuesta a un hipotético recorte del Estatuto a manos del TC.

Pujol, padrino político de Mas, en declaraciones a TV-3 sostuvo que "en teoría, hacer un referéndum sería la cosa más lógica del mundo", pero "otra cosa es que convenga hacerlo o no, porque el país ya está muy sacudido y castigado". Según el presidente de Convergència, ante un posible recorte estatutario, la reacción de Cataluña "no puede ser conformista".

El ex presidente de la Generalitat no quiso hacer sangre con su opinión: "¿Debe ser un referéndum o no? No necesariamente, aunque en teoría sería lo lógico. Pero es muy posible que no sea éste el camino que haya que tomar", remarcó. Pujol señaló: "como dice Artur Mas, se tendrá que analizar lo que hay".

El plan B planteado por el presidente de CiU, Artur Mas, ante una sentencia adversa del TC pasaría por convocar un nuevo referéndum en Cataluña, formar un Gobierno de concentración nacional o anticipar elecciones. Algo en lo que coincide con el presidente de ERC, Joan Puigcercós. Y la semana pasada, el ex presidente catalán y ex presidente del PSC Pasqual Maragall apostó por convocar un nuevo referéndum y organizar una manifestación masiva de protesta, con el objetivo de sacar hasta un millón de personas a la calle en el caso de que el Alto Tribunal laminara el Estatuto.

Pujol también tuvo puyas para los socios democristianos de Unió, en concreto, por su noviazgo con el PSC. Es más, quiso identificar a Artur Mas y José Montilla como únicos "líderes" en la escena política catalana, dejando de lado al líder de Unió, Josep Antoni Duran Lleida. "El liderazgo no es sólo un problema de inteligencia política, es también de perfil. El liderazgo político en Cataluña requiere un determinado perfil, diferente del de un presidente de la Comisión Europea, un ministro en Madrid, un presidente del Gobierno o un presidente de La Caixa", remachó.

Pujol expresó su desacuerdo con el encuentro al más alto nivel entre una delegación del PSC encabezada por Montilla y otra de Unió liderada por Josep Antoni Duran Lleida: "No me parece bien", manifestó el presidente de CDC, que agregó: "en Convergència no gustó".