La Junta prevé otro retraso en el arranque del metro de Sevilla

La Consejería de Obras Públicas esperará al informe técnico de Metro de Sevilla para anunciar si habrá un nuevo aplazamiento de la inauguración de la línea 1, prevista para el 20 de diciembre. No obstante, en el Gobierno andaluz se trabaja con la hipótesis de retrasar una vez más la apertura y atenuar de esta forma la alarma surgida después de que el miércoles se abriera de golpe un socavón que se tragó un quiosco y dos farolas en la estación de la Puerta de Jerez.

De momento, se ha incoado un expediente de oficio a las empresas que construyen el metro para determinar las causas exactas y el alcance del accidente, que se originó por una filtración de agua del subsuelo, según dijo ayer el director gerente de Ferrocarriles de la Junta, José Luis Nores. El agua ha originado una "pequeña piscinilla" en una parte de la estación, justo por donde tiene que pasar la línea del tren.Los técnicos de la UTE Metro de Sevilla (Sacyr, Dragados y GEA 21) estuvieron ayer inspeccionando la zona del siniestro y comprobando los daños, con sus "mejores expertos". La Consejería de Obras Públicas ha condicionado al informe que éstos emitan (que no debe prolongarse más allá de 24 horas) la decisión sobre el aplazamiento de la inauguración de la línea, que en un primer momento se fijó para antes de las elecciones locales de 2007.

La primera fecha de inauguración era la primavera del pasado 2007

Aunque el director gerente de Ferrocarriles apuntó que es "precipitado" hablar de retrasos, y calificó el incidente de "llamativo, pero no tan relevante", fuentes del Gobierno andaluz dieron por hecho un nuevo margen para la apertura, aún por precisar. En la resolución pesa la inquietud que el accidente ha generado en la ciudadanía y la necesidad de transmitir la certeza de que cuando el metro de Sevilla eche a andar lo va a hacer con las máximas garantías.

José Luis Nores indicó que se han inspeccionado todos los edificios colindantes y los parámetros son normales, es decir, no se ha detectado ninguna afección en los inmuebles ni en las calles. "Tenemos más de 2.000 puntos de auscultación, que se mide cada menos de una hora, y ningún edifico ha tenido el menor movimiento de tierra", señaló.

Ayer todavía faltaban líneas telefónicas por restituir, el tráfico de la calle Almirante Lobo estaba cortado y el aparcamiento que se sitúa por encima de la estación, parcialmente cerrado. La constructora hizo algunos trabajos para consolidar el terreno afectado y revisar si hay otras zonas que puedan registrar el mismo incidente, habida cuenta de que todo el subsuelo donde se asienta la estación está rodeado por corrientes de aguas que ejercen presión sobre la estructura.

La concesionaria resolvió rellenar el socavón con una inyección de mortero. El quiosco hundido se quedó en el fondo, ya que, según explicó el gerente, dejar abierto el agujero durante demasiado tiempo suponía un riesgo. Además, la caseta cayó del revés, circunstancia que hacía muy compleja su extracción. "Se ha preferido sacrificar los enseres que alargar el tiempo", explicó Nores.

El propietario del establecimiento, Juan Ariza, declaró -horas después del accidente que a punto estuvo de costarle la vida a su mujer y su hija, que estaban dentro del quiosco y lograron salir instantes antes del hundimiento- que no le dio tiempo a sacar ni el dinero ni la mercancía. Ahora las aseguradoras de la UTE tendrán que indemnizar al quiosquero y el Ayuntamiento debe procurarle un nuevo emplazamiento, agregó el gerente de Ferrocarriles.

Obras Públicas ha abierto de oficio un expediente informativo a Metro de Sevilla, como ya hiciera cuando se desplomó, en agosto de 2006, una viga de 100 toneladas en la ronda de circunvalación de la ciudad. La concesión administrativa de la línea 1 del metro recoge sanciones para estos casos, si bien, señalaron fuentes de Obras Públicas, hasta el momento no han trascendido y se está pendiente de la liquidación final de las obras.

Nores relató que las primeras informaciones de la UTE indican que el agujero que engulló el quiosco se produjo por una filtración de agua del subsuelo, que se coló entre dos pantallas-muro de la estación de Puerta de Jerez. El agua ha penetrado en parte de la estación y ha formado una "pequeña piscinilla" por donde está previsto que pase la línea del tren, aunque la inauguración de esta estación, en cuya parte externa se trabaja ahora, está prevista para la primavera de 2009. Según Nores, la evaluación respecto a esta zona es una de las claves para determinar cuando se inaugurará por fin el metro de Sevilla.