La cruz en la escuela
Ha tenido que ser una sentencia judicial la que nos recuerde que según la Constitución, España es un país aconfesional. Porque se vuelve a pretender que el crucifijo esté presente en las aulas de los colegios públicos pero, ¿podrían, también, los mahometanos de una comunidad escolar pedir que se colgara la media luna en las paredes de las clases?, ¿y los judíos, la estrella de David? Dando un paso más, ¿podría pedir un ferviente militante del PP tener a la vista la gaviota de su partido?, ¿y uno del PCE, la hoz y el martillo?, ¿y otro del PSOE, el puño y la rosa? ¿Qué le dirían a un hincha que quisiera tener presente los colores de su equipo de fútbol?, ¿y a los socios de las entidades culturales, deportivas, filatélicas... con pretensiones semejantes? ¿Va a quedar sitio en las paredes para las pizarras.
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