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Medio millar de centros educativos se apuntan a las movilizaciones

Estudiantes y sindicatos universitarios se suman a la manifestación del 29-N

El pulso de la Generalitat con todos los agentes de la enseñanza pública y parte de la concertada -ya que las 133 cooperativas se han sumado a la cruzada de la Plataforma per l'Ensenyament Públic contra la política "neoliberal" del Consell de Francisco Camps- continúa a dos días de la manifestación que recorrerá Valencia. Un balance favorable ya que, según Gemma Piqué, portavoz de la plataforma, "se han sumado al manifiesto más de 500 centros educativos".

La secretaria autonómica de Educación, Concha Gómez, no ha logrado desactivar, de momento, con su confuso "anuncio de moratoria", el nivel de las protestas. Ayer, los tres sindicatos estudiantiles -BEA, Campus Jove y Estudiants del Països Catalans, y los del personal universitario CC OO, STEPV, UGT y CGT- se sumaron a la plataforma en un acto en la Facultad de Filología de la Universitat de València.

"Ciudadanía en inglés ha sido la gota que ha colmado el vaso, pero los padres y los sindicatos llevamos mucho tiempo diciendo no a cómo se ha trabajado desde la consejería el desarrollo normativo de la Ley Orgánica de Educación (LOE), tanto en las mesas de negociación como en el Consejo Escolar Valenciano", zanjó Piqué. De manera que "en el marco de Bolonia", añadió Albert Sansano, del STEPV "esto no es más que una lucha contra las políticas neoliberales". Ángel Martí, de Escola Valenciana, pidió la intervención de la alta inspección del Gobierno, ya que en diciembre "los alumnos serán evaluados de unos contenidos que no se sabe cómo se han dado". Manolo Picó le recordó a Camps que está "frente a un conflicto social que trasciende lo sectorial" y añadió: "Nadie como Camps, representante del ala más neocon, ha ofendido tanto al profesorado, a los directores, a los alumnos y a la sociedad". En ese sentido, Javier González Zurita, de UGT, puntualizó que esta escalada neoconservadora, que "ha usado la política como arma partidista, empezó en abril del 2007, cuando Camps confirmó a [Alejandro] Font de Mora al frente de la consejería".

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