Sebastián ofrece a Citroën que fabrique en Vigo el coche eléctrico

El ministro de Industria, Miguel Sebastián, anunció ayer en Santiago de Compostela dos paquetes de medidas para evitar que la crisis arrastre a las fábricas de coches implantadas en España. Por una parte, diseñará, con las nueve comunidades autónomas que cuentan con centros de producción, un plan integral para el automóvil que presentará en el mes de enero. Por otra, creará grupos de trabajo bilaterales con la industria de Cataluña, País Vasco, Madrid, Aragón, Valencia, Andalucía, Castilla y León, Navarra y Galicia para abordar proyectos concretos en cada una de esas comunidades. El ministro anunció que este viernes mantendrá una reunión en Madrid con el director de PSA en Vigo, Piere Ianni, en la que abordará, conjuntamente con la Xunta, la posibilidad de que la planta gallega pueda fabricar un vehículo eléctrico, tal y como se ha acordado con Renault en Castilla y León y Nissan en Cataluña.

El sector duda de que la alternativa del vehículo verde salve de la crisis

Desde la fábrica de PSA señalaron que esperan que el encuentro "sea positivo" y que las medidas que se tomen a partir de enero de forma coordinada "ayuden al sector a superar la crisis". Para Citroën, esta primera reunión puede servir para "poner en común posibles líneas de colaboración que mejoren la situación actual". Dentro de estas líneas entrarían proyectos de I+D de la planta gallega.

Pero la alternativa de Sebastián no se ve desde la industria como la solución al grave problema de la caída de demanda de coches. Y menos en un futuro inmediato. Fuentes del sector consideran que el desarrollo de un prototipo de vehículo limpio no es "algo que se pueda materializar de la noche a la mañana ni en una planta concreta". Muy al contrario, empresas del sector insisten en que "son los fabricantes" y no la iniciativa pública, los que tienen que tomar las riendas de la producción en serie de vehículos híbridos, y trabajar durante "tres o cuatro años" en su motorización.

Paradójicamente, en Galicia, el Cluster del automóvil, que agrupa a las empresas de componentes, tiene desde hace tres años congelado un proyecto para desarrollar I+D gallego en lo que sería su segundo centro tecnológico. El Ctag II, nombre con el que se ha bautizado a esta iniciativa, trabajaría en el campo de la electrónica para vehículos inteligentes, en nuevos materiales y en la formación específica para el sector. El grupo PSA Peugeot Citroën, por su parte, ha diseñado en los últimos años motorizaciones para vehículos verdes que todavía están en pruebas: el F4 y el Peugeot 308. Hasta ahora, los intentos de los fabricantes han sido constantes en los últimos 20 años, como constantes han sido los fracasos. Sólo Toyota ha sabido, por el momento, servir de paradigma al mercado con el modelo Prius, que utiliza baterías de níquel.

Para el presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, la iniciativa de que Galicia establezca un grupo de trabajo es "muy positivo", y más lo es que la convocatoria a Citroën se haya concretado "de manera inmediata". Tras dos horas de encuentro, Touriño, que se incorporó a la reunión en los momentos finales, subrayó que el resultado ha sido "positivo". Insistió en que para responder a esta crisis "sólo cabe hacerlo de manera coordinada con un plan integral que cuente de forma concertada con las autonomías". "Y que eso se haga en el marco de un plan europeo, pues la recuperación de la demanda sólo se puede dar en ese ámbito", apuntó.

Diálogo social

El titular del Ejecutivo autónomo también resaltó la concertación y diálogo social con el conjunto del sector del automóvil, que calificó de "indispensables" para plantear todos los programas. En este sentido, indicó que son necesarias tanto "medidas a corto plazo", para formación y empleo y para apoyar la liquidez de las empresas, "como las estructurales y a medio y largo plazo", que también estarán previstas en el plan único integral que presentará el Gobierno central en enero.

En lo que respecta esa batería de medidas de choque para la industria en España, Miguel Sebastián señaló que "para salir de la crisis lo más rápido posible no puede haber 17 planes. La única fórmula de lograrlo es actuar porque juntos tendremos más efectividad". Para concretar este proyecto, el Gobierno esperará a que hoy la Comisión Europea plantee sus propias alternativas para reactivar el consumo.