David Cal cede sus derechos de imagen a la Diputación

La polémica generada en torno al medallista olímpico David Cal y su relación con las instituciones no cesa. La brecha abierta entre el deportista y la Consellería de Cultura e Deporte (BNG) por una deuda, que en septiembre rondaba los 100.000 euros, fue aprovechada por Rafael Louzán (PP) para acaparar, a través de la Diputación de Pontevedra, la imagen del piragüista de Cangas a través de un convenio calificado de "confuso" por expertos en derecho deportivo. El documento, firmado por Santiago Sanmamed, presidente de la Real Federación Española de Piragüismo (RFEP), y el patronato de Turismo Rías Baixas, presidido por Louzán, estipula que la federación se compromete a colaborar estrechamente y a hacer que Cal participe en la promoción de la imagen turística de Pontevedra y de la Diputación. En opinión de Caruncho y Tomé Abogados, "se están mezclando los eventos deportivos con los que no lo son".

El objetivo es "potenciar la imagen de Pontevedra en actividades en las que participe la RFEP". Para ello, la federación cede "todos los derechos de imagen, marca o patrocinio para todo el mundo" derivados de la actividad deportiva del palista. Esa exclusividad "no tiene mucho sentido porque no es una empresa que se tenga que enfrentar a la competencia de otras marcas", según expertos jurídicos. En cualquier caso, deja en manos del organismo provincial la presencia de Cal en actos organizados por otras instituciones (que sí pueden subvencionarle) y compromete que un representante de Turismo Rías Baixas acudirá a dichos eventos.

El organismo autónomo Turismo Rías Baixas, dependiente de la institución provincial y presidido por Louzán, dio luz verde el 22 de octubre al acuerdo de colaboración por un valor de 90.000 euros, cuantía que se abonará para "el patrocinio directo de Cal". Y surge la primera duda: ¿Por qué no se firma, entonces, con el palista? "En este caso, lo normal es que se haga directamente con el deportista ya que el dinero que recibe la federación debería destinarlo a sus asociados y actividades, no a uno en concreto".

El documento recoge que el organismo que gestiona Sanmamed, miembro además de la junta del PP de Pontevedra, es poseedor de sus derechos de imagen para eventos y actos de naturaleza deportiva. Es decir, aquella vinculada con su actividad y la federación. Lo chocante es que se detallan actuaciones que la Diputación incluye en el paquete y que nada tienen que ver con esa vertiente deportiva. Así, se citan: ferias turísticas, recepciones oficiales, entregas de premios, sesiones vídeo-fotográficas, actos mediáticos, foros, programas de televisión y otros actos sociales. "No es habitual que una federación deportiva gestione este tipo de asuntos, actúa como su agente, a no ser que Cal le hubiese cedido todos los derechos, los de la imagen deportiva y los de la personal", afirman un experto, que concluye: "Se están incluyendo obligaciones que requerirían la firma de un convenio aparte con el propio Cal". Una confusión que puede terminar en el juzgado. "El convenio deja la puerta abierta a uno o varios litigios", señalan las mismas fuentes.

La vigencia del contrato es de carácter retroactivo desde el 1 de marzo al 31 de diciembre de 2008. "Han regularizado una situación que ya estaba sucediendo sin contrato".