La Xunta contrata 2.000 parados y asegura préstamos particulares

Más medidas contra la crisis. Tras el impulso a la licitación pública de enero y a la actividad empresarial de octubre, el presidente de la Xunta anunció ayer la tercera oleada de recetas para paliar la contracción económica, que presentará formalmente al Parlamento el próximo miércoles. Se trata de un grupo de actuaciones que supondrá un desembolso total de 49 millones de euros y que presentan dos grandes novedades: la contratación directa de 2.000 desempleados y la concertación con las entidades financieras de un seguro, destinado a cubrir cuotas de los préstamos para vivienda o coche en caso de que el solicitante pierda su empleo.

Emilio Pérez Touriño informó ayer al Consello de la Xunta de los rasgos básicos del nuevo grupo de medidas, que en su mayor parte entrarán en vigor a principios del año próximo. Según confirmó en la conferencia de prensa posterior a la reunión del Gobierno gallego, el hilo conductor de las nuevas decisiones contra la crisis es el del impulso de la actividad económica. "No hay otra receta, lo que podemos hacer es anticipar medidas", declaró Touriño. Se trata, según explicó, de "apoyar la inversión, reforzar la capitalización del país y prestar apoyo financiero a las empresas".

El plan anunciado por Touriño incluye acciones valoradas en 49 millones

Un primer grupo de las medidas anunciadas ayer consiste en la contratación de 2.000 desempleados para efectuar tareas de recuperación de espacios naturales, mejora de carreteras y labores silvícolas, con un coste de 19 millones de euros. El segundo grupo consiste en el Plan Extraordinario de Formación para el sector de la automoción, adelantado esta misma semana a las industrias afectadas. Consistirá en la promoción de actividades formativas a las que la Xunta aportará 10 millones de euros y que beneficiarán a un potencial de 10.000 empleados. El tercer y último bloque incluye medidas de apoyo a los colectivos más desfavorecidos y con incidencia directa en el consumo. Ahí entran tanto el seguro para los préstamos para vivienda y coche, con una aportación de 10 millones de euros, como el refuerzo de medidas de autoempleo para parados de larga duración, de idéntico importe.

La contratación de los 2.000 desempleados es una medida "keynesiana pura y dura", de generación de empleo desde la actividad pública. Cinco millones de euros se destinarán a tareas de limpieza y conservación medioambiental, otros tantos a la conservación y mantenimiento de infraestructuras y nueve millones, a tareas de cuidado y prevención en los montes gallegos. Los contratos serán de seis meses de duración y se realizarán a través de Tragsa y su filial gallega Tragsega, por las facilidades que presentan para agilizar la contratación "de forma inmediata", afirmó Touriño.

El Plan Extraordinario de Formación, mientras, pretende prestar apoyo al sector de la automoción. "Corremos el riesgo, con una caída de la demanda del 40%, de que un sector estratégico, competitivo, pueda quedar irreparablemente dañado si no lo ayudamos a pasar este período crítico", advirtió. Así, el plan de formación pretende aliviar a la industria auxiliar durante el "brusco" período de reducción de la carga de trabajo en Citroën. Ese período, vaticinó Touriño, tendrá especial repercusión en la industria que depende de la compañía francesa, para la que se desarrollarán convenios que firmará la Consellería de Traballo con las respectivas empresas. La aportación máxima de la Xunta para cada convenio será de 300.00 euros, que completarán las empresas con una aportación del 40% del presupuesto.

Touriño hizo especial hincapié en "la más novedosa" de las nuevas recetas, las ayudas a los préstamos para la compra de vivienda y coche o para la rehabilitación de vivienda, siempre que esté destinada a implantar dispositivos de ahorro energético. La Xunta subvencionará el 100% de un seguro de pagos protegidos para todos los trabajadores que formalicen un préstamo para los tres casos citados. En caso de que el solicitante del préstamo pierda su empleo o sufra una incapacidad temporal, la Xunta se hará cargo de las cuotas, con lo que se pretende "que nadie posponga la decisión de compra debido a la incertidumbre económica".

La aportación del Gobierno gallego a este seguro, de 10 millones de euros, permitirá firmar un acuerdo con las entidades financieras que genere hasta 850 millones de euros en financiación. Las condiciones del acuerdo "se articularán en las próximas semanas", añadió el presidente, aunque adelantó que los préstamos tendrán una duración máxima de ocho años y cubrirán seis cuotas consecutivas y 18 de vida útil del crédito concertado.