Olvidos y silencios en el 'caso Zarra'

Olvidos y silencios en el caso Zarra. A la falta de memoria del alcalde, Juan José Rubio, cuando declaró el pasado 30 de octubre en el Juzgado de Instrucción número 2 de Requena se suma el silencio de los cuatro concejales de su formación política. El pasado jueves acudieron al juzgado para declarar como imputados y pidieron a la juez que aplazara la comparecencia porque no habían tenido acceso a la documentación de la causa. Juez y fiscal aceptaron.

Juan José Rubio está acusado, junto a su hijo, los demás ediles denunciados por la Fiscalía y tres inmobiliarias, de supuestos delitos de prevaricación urbanística, negociación prohibida, estafa y delito contra la ordenación del territorio. La Fiscalía tiene claro que todos ellos formaban una trama que sirvió para obtener beneficios mediante la concesión de licencias de obras en parcelas de suelo no urbanizable común, licencias que no se ajustan a la legalidad, así como la adjudicación de obras a la empresa del hijo del alcalde, Telyzan, de forma también ilegal. La Fiscalía cifra en 73 los chalés construidos ilegalmente entre 2003 y 2007 en cinco partidas del término municipal de Zarra. Pero el primer edil dio otra versión de los hechos y corrigió la cifra a 27.

El primer edil dice que su idea era que las casas se legalizaran

Rubio reconoció que Zarra no tiene Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y que se ha regido por normas subsidiarias aprobadas hace al menos 20 años. Aseguró que "no hay concejal propiamente de Urbanismo", que "se lleva entre todos". Aseguró que no tenía idea "de las casas de aperos" y que aplicó escrupulosamente la legislación vigente. La Fiscalía sostiene que concedió licencias para construir casas de aperos que en realidad son chalés de dos alturas y con piscina en emplazamientos que la ley no contempla. De hecho, la ley dice, entre otras cosas, que la extensión mínima de terreno para la construcción de una vivienda tiene que ser de 10.000 metros cuadrados, pero en la mayoría ni siquiera eso se cumple.

Según él, desde 2003 han trabajado en Zarra "cuatro o cinco empresas". Menciona varias, pero no a Telyzan. El fiscal es quien le pregunta por esa empresa, de la que fue fundador y cuya participación vendió a su hijo. Y entonces contesta que la conoce, que es de su hijo, que hace obras en Zarra y otros pueblos y que no la ha mencionado antes porque lo ha olvidado.

Rubio Navarro aseguró que no tenía relación profesional con Telyzan. Aclaró que mientras fue administrador mancomunado de Telyzan no realizó obras en Zarra. Respecto a que su nombre figure en al menos dos cuentas de la mercantil, aseguró no explicárselo "porque las cuentas se aperturaron en 2003 y se cancelaron en 2005". El alcalde reconoció al menos una relación con Telyzan en lo que a negocios inmobiliarios se refiere, "la subasta pública en relación con un solar".