La juez investiga la actuación de los Mossos que destrozó los testículos a un detenido

La justicia investigará una intervención de los Mossos d'Esquadra en la que un detenido acabó con los genitales destrozados. La titular del juzgado de instrucción número 7 de Gavà ha admitido a trámite la denuncia presentada por José Antonio Coscolín Mellado, que acusa a la policía autonómica de lesiones, torturas y abuso de autoridad. El pasado martes, el hombre fue arrestado como presunto miembro de una red de extorsionadores. Durante el arresto, la policía lanzó una especie de granada de aturdimiento que fue a parar a su entrepierna. Ha perdido uno de los testículos por completo y el otro, parcialmente, informó ayer un portavoz oficial del hospital de Bellvitge, donde permanece ingresado.

Tras abrir diligencias previas, la juez solicitará a los Mossos d'Esquadra el informe de la actuación del martes en Castelldefels. A las nueve de la mañana, agentes de los Grupos Especiales de Intervención (GEI) de la policía autonómica interceptaron un coche de gran potencia en el que viajaban José Antonio y el responsable de una empresa de cobro de morosos que utilizaba, presuntamente, métodos muy violentos para recuperar el dinero de los clientes que contrataban sus servicios.

Tras romper las ventanillas del vehículo, los mossos arrojaron una granada stun (aturdir, en inglés) en su interior. "Con tan mala fortuna", señalaron fuentes policiales, que fue a parar al asiento de José Antonio. Éste cerró las piernas en un acto reflejo y el artefacto explotó. La granada stun produce unos niveles muy altos de ruido y de luz que aturden temporalmente a la persona que se expone a sus efectos.

Al hacerse pública la denuncia ante el juzgado, los Mossos explicaron de forma oficial que el detenido sólo había sufrido lesiones "leves" en los genitales. No es así, según admitieron ayer las mismas fuentes. Un portavoz del hospital aseguró que, durante una operación quirúrgica, los médicos tuvieron que extraer uno de los testículos de José Antonio. El otro también lo ha perdido "en sus tres cuartas partes", señaló el portavoz de Bellvitge. En los próximos días, los médicos examinarán si el hombre se ha quedado estéril.

La operación policial acabó con tres detenidos -entre ellos, José Antonio- que están acusados de propinar palizas a morosos. La banda disponía, supuestamente, de algo parecido a una sala de torturas donde forzaban a los morosos a saldar sus deudas.