"Me impresiona la preocupación de los empresarios ante la crisis"

La crisis está dejando imágenes imborrables en todo el mundo. También en la provincia de Alicante, donde más de 3.000 empresarios han desbordado las tres jornadas sobre la crisis convocadas durante las dos últimas semanas por la Cámara de Comercio, la patronal Coepa y Caja Mediterráneo (CAM). Masivas reuniones que han sorprendido incluso a los convocantes. Hasta tal punto que el presidente de la Cámara de Comercio de Alicante, Antonio Fernández Valenzuela (Campillo de Llerena, Badajoz, 1947), consideró la primera cumbre, que reunió la semana pasada en la ciudad de Alicante a más de 1.400 personas, el acto "más importante de mi vida pública y empresarial".

Pregunta. ¿De verdad la reunión de Alicante es el acto más importante de su vida pública y empresarial? ¿Tanta trascendencia?

"Las realidades han cambiado en un año, y más que van a cambiar"

"Pasamos de la reivindicación pura y dura a dar ánimos"

"Cada mes unos cuantos miles de trabajadores van al paro"

"La rumorología ponía en cuestión la solidez de nuestra caja"

Respuesta. Sí lo es. Más que por la trascendencia, por el significado. Reunir a 1.400 personas vinculadas al mundo de la empresa en un acto donde se va a hablar exclusivamente de economía lo que pone de manifiesto, y es lo que me impresiona y me inquieta, es el nivel de preocupación y de incertidumbre que tienen en estos momentos los empresarios. Es por eso por lo que es el acto más importante, porque lo que está encima de la mesa afecta a mucha gente: a los empresarios, a sus trabajadores y, en definitiva, a la sociedad.

P. Pero usted ha vivido muchas batallas y otras crisis

R. No como esta. Esta crisis es la más importante que he conocido porque se dan una serie de factores al mismo tiempo que nunca se habían dado. Y porque, además, durante los últimos años se ha creado un modelo, que es lo que se conoce como economía globalizada, y parece que los hechos nos indican claramente que ése no es el camino.

P. ¿Tanto miedo hay para que más de 3.000 empresarios hayan acudido a las jornadas?

R. No sé medir si hay o no hay miedo, pero precisamente lo que me impresiona es eso. No puedo afirmar: sí hay miedo, pero lo que me inquieta, me ocupa y me preocupa es precisamente eso.

P. ¿Cree que puede haber, en ese sentido, más preocupación en Alicante que en otros puntos, donde no se han convocado ese tipo de reuniones?

R. Creo que la preocupación se da en todo el país, en todo el continente y en todo el mundo. Alicante tiene sus características, algunas de ellas muy específicas, pero otras zonas de España tienen otras.

P. ¿Entonces sólo ha sido una cuestión de que los convocantes se organizaran y dieran el paso?

R. Tanto como organizarnos, no. Fue una idea que surgió, vimos que era bueno. Llevo mucho tiempo hablando de confianza. Pasamos en un momento determinado de la reivindicación pura y dura a dar ánimos porque la situación cambia, y lo hace a una velocidad que si eres mínimamente responsable tienes que cambiar también. Surge la idea y decidimos explicar a los empresarios alicantinos lo que está pasando, tratamos de llevarles un poco de esperanza y confianza. La sorpresa: la respuesta.

P. ¿Han tenido ocasión de pulsar la opinión de los empresarios tras las reuniones?

R. Claro. Hay opiniones para todos los gustos. Los hay que consideran que es un acierto haberlo hecho así y otros que piensan que se podría haber hecho de otra manera, pero eso ocurre siempre. En general es positivo porque no es lo mismo afrontar una situación sin tener al menos una idea de qué está pasando y cómo se prevé que puede evolucionar, a tenerla. Pretendíamos que tuvieran esa información y que les sirviera para afrontar los próximos meses, que no van a ser sencillos.

P. ¿Han planteado nuevas iniciativas en esta línea?

R. En estos momentos no hay nada planificado, excepto del 27 al 30 de octubre, cuando tendremos en Alicante las discusiones con los empresarios del plan que la Cámara está redactando junto con la Universidad de Alicante. En esos encuentro volveremos a hablar de este tipo de cosas, es inevitable.

P. De hecho, hace un año, a raíz de las críticas de la Cámara sobre la caída de la inversión por parte del Gobierno y la Generalitat, el presidente Camps se puso al frente del plan estratégico para la provincia. ¿En qué momento se encuentra la parte que aporta la Cámara? ¿Con la que está cayendo desde principios de año no quedará desfasado?

R. No porque, precisamente, el plan se está haciendo en el meollo de la crisis. Creo que en ese sentido, el plan va a salir hasta beneficiado. Las realidades, efectivamente, han cambiado en un año y más que van a cambiar en los próximos meses. El plan empezará a discutirse con los empresarios en la semana del 27. Ahora tenemos las monografías que han hecho los expertos, y queremos que esa opinión se confronte con el día a día, y de esa confrontación de ideas salgan, entre comillas, soluciones posibles.

P. ¿Cuándo puede estar cerrado el documento?

R. En un mes y medio o dos meses, por nuestra parte.

P. Supongo que el plan repasará la situación económica de Alicante, a la que se ha referido en estas semanas. Mencionó que el turismo es el sector que registra cifras menos negativas. La construcción está en el otro extremo. ¿Qué datos de los que maneja le preocupan más?

R. Su conjunto no es positivo en ninguno de sus parámetros.

P. Sin embargo, el último dato de paro no sitúa a Alicante como la provincia con la peor evolución interanual, ni siquiera de la Comunidad Valenciana.

R. Ese no es el tema que me preocupa. Los datos se pueden medir de muchas maneras. Lo único que sé es que cada mes que pasa unos cuantos miles de trabajadores de Alicante van al desempleo, luego cada uno que lea los datos como quiera. Lo que me preocupa es lo nuestro.

P. ¿Cómo puede quedar la economía alicantina tras este tsunami? ¿tenderá a terciarizarse todavía más?

R. Es complicado en estos momentos predecir qué va a pasar cuando pase el tsunami. Creo que va a haber muchas y muy importantes novedades en el tema financiero, y también en la distribución, la producción y la rentabilización del trabajo.

P. Durante su intervención en las reuniones ha insistido en reclamar mayor confianza en las instituciones y ha mencionado especialmente a la CAM, a la que ha pedido lealtad. ¿Se estaba abandonando un poco?

R. No. En los últimos meses hemos asistido a una corriente de rumorología, efectivamente no desinteresada, donde de forma velada se ponía en cuestión la solvencia y solidez de nuestra caja, y ese era un tema que había que abortar.

P. ¿Es la situación general?

R. Todas las entidades financieras de este país tienen problemas de liquidez, e internacionalmente también, lo que no se puede es, "desinteresadamente" [ironiza] hacer correr rumores que afecten a unos o a otros, que al final a quien perjudican es a los ciudadanos de la provincia.

P. ¿Inaugurará como presidente la nueva sede de la Cámara en Alicante?

R. La vida puede cambiar en minutos, pero creo que si transcurre todo con normalidad, en la primera parte del año que viene espero que ese edificio esté listo. Si eso es así, lo inauguraré. Y si no, pues lo inaugurará otro. Estar o no estar en la placa tiene importancia, pero no es lo importante.