García Antón busca salidas al 'parany' pese a ser ilegal

Lejos de anunciar mano dura para que se cumpla la ley, y pese a la imputación del director territorial en Castellón por un presunto delito contra el medio ambiente, el consejero de Medio Ambiente, José Ramón García Antón, anunció ayer su intención de "buscar soluciones" a la "problemática" de la caza con parany. El problema de este sistema de caza es que ha sido declarado ilegal por el Tribunal Superior de Justicia valenciano, el Supremo y el Tribunal Europeo porque es un método "masivo y no selectivo". En el parany -árbol preparado con varillas impregnadas de material viscoso- quedan atrapados todo tipo de pájaros, incluidas especies protegidas, por lo que está prohibido.

Aún así, García Antón, tras una reunión con la asociación de paranyers Apaval, se comprometió a abrir "una vía de diálogo" para buscar "soluciones", ya que el Consell está a favor de intentar legalizar esta práctica. Apaval destacó que "entre el 60 y el 70%" de los municipios de Castellón "históricamente ha tenido como tradición la práctica de la caza de tordo con parany". También se practica en el Camp del Turia, Los Serranos y la Vall d'Albaida. La prohibición, según fuentes de la consejería, afecta a 17.000 personas.

El Grupo para el Estudio y la Conservación de los Espacios Naturales (Gecen) acusó de nuevo a la consejería de "prevaricación" por no poner los medios para evitar el parany y exigió que explique los motivos por los que "sólo denunció al 5,2% de los paranys activos en 2007". Precisamente una denuncia de Gecen por la falta de actuación contra esta caza ilegal ha llevado ante el juez a un responsable de Medio Ambiente y a 12 paranyers.