El Ayuntamiento se queja de que se congele el gasto social pese al aumento de la demanda

"Las leyes están para cumplirlas, y si se tienen que aplicar la Ley de la Dependencia y la de Servicios Sociales, hay que contar con los suficientes recursos. Y más todavía en una época en que se prevé un importante incremento de la demanda de ayuda social derivada de la situación de crisis financiera". Así se expresaba ayer un alto cargo del Consistorio barcelonés a propósito de las declaraciones de la titular del Departamento de Acción Social y Ciudadanía de la Generalitat, Carme Capdevila, sobre la previsible congelación del presupresupuesto de 2009 para ayudas sociales.

Ante un cálculo de incremento de demanda de atención social de entre el 15% y el 20% en el caso de Barcelona, a los gestores del Consistorio les preocupa que en el otro lado de la plaza de Sant Jaume se hable de congelación.

El Gobierno apunta que cada año ha incrementado las ayudas sociales

La cuestión estuvo sobre la mesa ayer en la reunión de la comisión de gobierno del Ayuntamiento, en la que se esbozaron las líneas generales de los presupuestos para el año próximo. El pasado martes, el edil responsable de la cartera social, Ricard Gomà (ICV), avanzó que la partida para gasto social para 2009 se debería incrementar el 15% respecto a lo presupuestado y destinado este año, unos 112 millones de euros.

El quid de la cuextión está en que parte de ese gasto social es subvencionado, en parte, por el Gobierno catalán. Si las transferencias de la Generalitat no se corresponden con la factura real de la atención social, será el Consistorio el que la acabe sufragando. Y eso es lo que está empezando a preocupar seriamente en el Ayuntamiento, que está haciendo bandera de la mejora de la atención social como un eje de su programa.

Portavoces de Acción Social matizaron ayer que la consejera no dijo que el gasto social se congelaría, sino que "prácticamente quedaría congelado". E insistieron en que la política de ese departamento sigue siendo la de incrementar las ayudas a los ayuntamientos. Al de Barcelona le transfirieron en 2007 casi 28 millones de euros para sufragar el gasto social, cantidad que se ha elevado a 33,5 millones en el ejercicio de este año.

Los datos que apuntan a un constante aumento de los problemas ligados a la crisis se suceden día a día. Ayer, por ejemplo, la Fundación Banco de los Alimentos informó de que en el primer semestre de 2008 se ha producido un incremento de 12.000 personas que recibieron alimentos. En números globales fueron 142.000.