Detenidos la esposa y el hijo del ex jefe policial de Coslada
Los familiares de Ginés Jiménez están acusados de blanqueo de dinero.- "Estoy indignado y sorprendido por estas acusaciones", afirma el hijo
La llamada Operación Bloque, que puso al descubierto una supuesta red de corrupción y extorsiones en la Policía Local de Coslada, vivió ayer su segundo capítulo importante. María del Carmen Pérez Martínez, de 49 años y esposa del máximo responsable policial Ginés Jiménez, y el hijo de ambos, también de nombre Ginés Jiménez, de 22 años, fueron detenidos acusados de un delito de blanqueo de capitales. Ambos se negaron a prestar declaración ante los agentes de la Brigada de Policía Judicial y quedaron en libertad con cargos a la espera de ser interrogados por el juez que instruya el caso.
Los dos detenidos están pendientes de declarar ante el juez que lleve el caso
Los arrestos se producen cuatro meses después del inicio de la llamada Operación Bloque, cuando fueron detenidos 26 agentes, entre ellos el máximo responsable. El registro de la vivienda de Jiménez permitió a la policía recuperar documentos en los que se demostraba que Ginés había adquirido propiedades que no elevó a escritura pública. Tan sólo mantenía contratos privados de compraventa, por lo que evitaba el pago de los impuestos.
Los agentes del Grupo VII de la Brigada de Policía Judicial, especializado en el blanqueo de capitales, comenzaron a investigar desde entonces las propiedades de Ginés Jiménez. Para ello, se centraron en todas las cuentas bancarias que tenía abiertas el jefe de policía y sus familiares.Los agentes también investigaron los registros de la propiedad. Ahí descubrieron que la esposa de Ginés, María del Carmen Pérez Martínez, y su hijo habían adquirido al menos tres pisos en Coslada, pese a que ninguno de ellos tenía ingresos suficientes para hacer frente a los pagos. Dos de esas viviendas fueron adquiridas a los Barral, unos hermanos que son los grandes propietarios de suelo de Coslada, según fuentes de la investigación. El delito de blanqueo de capital está penado con penas de hasta seis años de prisión, según el artículo 301 del Código Penal.
Fuentes de la Jefatura Superior de Policía informaron de que el jefe Ginés Jiménez Buendía y su número dos y supuesto dirigente del grupo de policías llamado El Bloque, Carlos Martínez Gil, también están acusados del mismo delito de blanqueo de capital. La operación comenzó el pasado 8 de mayo con la detención de 26 agentes, entre los que estaba Jiménez. De ellos, permanecen en prisión preventiva comunicada y sin fianza 13 de ellos. Se encuentran en el módulo 6 de la cárcel de Alcalá-Meco.
La policía ha recabado en los últimos meses denuncias de los empresarios y hosteleros de Coslada. Algunos afirmaron que el hijo de Ginés Jiménez les estaba presionando para que emitieran facturas de las comidas y cenas que supuestamente no pagaba su padre en los locales más lujosos de la localidad. Eso también le permitiría justificar algunos desembolsos de la familia. Fuentes de la investigación aseguraron que la presión ejercida por el hijo a estos empresarios ha estado a punto de rozar el delito de coacciones.
La detención de la esposa y del hijo de Jiménez se produjo a las ocho de la mañana en el domicilio familiar. Los arrestados fueron trasladados a la sede de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, en la calle del Doctor Federico Rubio y Gali. Allí se les informó del motivo de su detención y se inició un interrogatorio. Por indicación de su abogado, Oskar Zein, rechazaron prestar declaración. Afirmaron que lo harán delante del juez que instruya el caso. Al tratarse de una pieza separada, lo más probable es que lo instruya otro magistrado, en lugar de hacerlo el que lleva el caso Coslada, el titular del número 21 de plaza de Castilla, Eduardo Cruz Torres, según fuentes de la investigación. Ahora tendrá que entrar en reparto. La Fiscalía Anticorrupción de Madrid estuvo informada al detalle de todas las detenciones.
Los dos detenidos salieron de la jefatura alrededor de la una de la tarde en un taxi. Ambos viajaban en el asiento trasero del vehículo. Se taparon las caras para no ser grabados por las numerosas cámaras de televisión que estaban en la puerta del edificio policial.
Ginés Jiménez hijo se mostró "muy indignado y sorprendido" de su detención, según explicó por la tarde en una conversación telefónica con EL PAÍS. Mantuvo en todo momento que él es inocente y que no tiene nada que ocultar. "No me parece normal todo lo que se ha producido con mi padre y ahora lo que se ha dado con mi madre y conmigo. No entiendo por qué he sido detenido y espero que el juez me explique todos los cargos para que yo le pueda dar mi versión", mantuvo el acusado.
"No me ha parecido nada bien el abucheo y el despliegue que hemos tenido que soportar contra mí, contra mi madre y mi familia. Todo ha sido muy desproporcionado", concluyó Jiménez Pérez. La conversación cesó en este punto, ya que el detenido prefirió no dar más explicaciones. "El resto se lo diré al juez", concluyó.
Fuentes de la investigación destacaron que el hijo de Ginés opositó a la Policía Municipal de Madrid el pasado verano. Aprobó los dos primeros ejercicios (hasta las pruebas físicas), pero suspendió el tercero. Si al final es declarado culpable del delito de blanqueo de capital, no podrá optar a ser policía. Uno de los requisitos de las convocatorias es que el aspirante carezca de antecedentes penales. "Tenía muchos apoyos de los mandos de Madrid, pero de poco le han servido", explicaron algunos responsables policiales.
La policía no descarta que se produzcan más detenciones en las próximas fechas, entre los que podría haber algún empresario muy cercano al jefe Ginés Jiménez. Los agentes están a la espera de las instrucciones que ordene la Fiscalía Anticorrupción de Madrid.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.