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Reportaje:

La tragedia de una familia en apuros

La Guardia Civil investiga las causas del incendio que mató a dos niños que esperaban a su padre en una furgoneta aparcada en una localidad de Cuenca

Pablo Linde

Hugo y Nancy forman un matrimonio de ecuatorianos (28 y 26 años, respectivamente) que comenzaba a pasar apuros por la crisis. Ella está a punto de terminar unas actividades para parados del Ayuntamiento de Quintanar del Rey (Cuenca, 7.500 habitantes). Él se dedicaba a la construcción, pero ante la crisis del sector, comenzaba a buscar otros empleos. El jueves fue a ver si le salía algo en una fábrica de humus para champiñones, una de las actividades agrícolas más frecuentes en el pueblo. Llevó en su furgoneta a dos de sus tres hijos, los dejó en el vehículo mientras entraba a la oficina a hacer las gestiones y, a los pocos minutos, vio humo en el aparcamiento. Cuando llegó a la furgoneta, los niños, de 3 y 5 años, ya habían muerto por el fuego.

Las causas del incendio seguían siendo ayer un misterio. El alcalde del municipio, Martín Cebrián, explicó hacia dónde apuntan la investigación de la Guardia Civil: "Aún no sabemos cómo se produjo el fuego. Pero parece que derritió las zapatas de los frenos. La furgoneta, que estaba en una pequeña pendiente, se deslizó hacia un bordillo. La colisión provocó que saliese el combustible y luego se produjo una enorme explosión".

Cuando el padre y los demás adultos que estaban en la zona vieron el humo e intentaron apagarlo con un extintor, ya no se podía hacer nada por la vida de los pequeños. Según el regidor, Hugo asegura que dejó a los niños en la parte delantera del vehículo, de menos de un año de antigüedad. Los cadáveres de los niños fueron rescatados de la segunda y tercera fila de asientos, lo que le hace pensar que el incendio se produjo delante e intentaron huir hacia atrás. La furgoneta permanecía ayer en el mismo sitio, calcinada, junto a una mancha negra de varios metros de longitud.

Los vecinos del municipio estaban ayer sobrecogidos. Aunque los padres de los niños son ecuatorianos, sus tres hijos han nacido en el pueblo y "estaban plenamente integrados", cuenta el alcalde. Hugo llegó a Quintanar en 1999 y Nancy se mudó desde Ecuador tres años después. A Quintanar han ido arribando luego varios familiares suyos. Padres del matrimonio, junto con hermanos y primos asentados en España, los acompañaban ayer, ayudados por los psicólogos que les atendieron.

"A ella la sedaron, porque no se tenía en pie", contaba ayer una vecina y compañera de Nancy. "Menos mal que la hija pequeña [de 20 meses] se quedó con la madre; nunca dejaban a los niños solos", explica.

El Ayuntamiento de Quintanar del Rey ha decretado tres días de luto. El funeral por los niños, que serán enterrados en España ante la negativa de la juez de repatriar sus cadáveres a Ecuador, se celebrará esta tarde.

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Varios especialistas inspeccionan la furgoneta en la que murieron quemados los dos niños.
Varios especialistas inspeccionan la furgoneta en la que murieron quemados los dos niños.MANUEL ESCALERA
Nancy (derecha), madre de los niños, a la salida de su domicilio.
Nancy (derecha), madre de los niños, a la salida de su domicilio.M. ESCALERA

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Sobre la firma

Pablo Linde
Escribe en EL PAÍS desde 2007 y está especializado en temas sanitarios y de salud. Ha cubierto la pandemia del coronavirus, escrito dos libros y ganado algunos premios en su área. Antes se dedicó varios años al periodismo local en Andalucía.

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