El PSC prepara una respuesta al Gobierno con otros partidos por la financiación

José Montilla no está por rasgarse las vestiduras pese a la evidencia de que el Estatuto catalán será incumplido el próximo sábado, al expirar el plazo para que Gobierno y Generalitat acuerden la nueva financiación. Nada hace prever un acuerdo de aquí a entonces, pero el presidente de la Generalitat ha frenado las intenciones de sus socios de Esquerra Republicana y de Iniciativa y evitará, al menos por ahora, una puesta en escena que dramatice en exceso el descontento del Gobierno catalán con el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero.

Si no hay cambios de última hora, el tripartito y Convergència i Unió, los partidos que apoyaron el Estatuto de Cataluña, se limitarán el sábado a celebrar una reunión para constatar la falta de acuerdo con el Ministerio de Economía y buscar una respuesta unitaria.

Montilla quiere evitar dar una imagen de debilidad política ante el Gobierno central. "El presidente continuará negociando para que el 1 de enero los presupuestos de la Generalitat incluyan la nueva financiación", resumieron ayer fuentes próximas al presidente. Éstas insistieron en que el bajo relieve del acto del sábado no es "ni mucho menos" un paso atrás del Gobierno catalán ante Zapatero. Por esta razón el Gobierno catalán baraja convocar un acto abierto a la ciudadanía para reclamar la financiación. Éste, sin embargo, no se celebraría durante el periodo vacacional. Por ahora el principal objetivo es que Convergència i Unió no se desmarque del frente unitario. Por ahora, lo único que podría romperlo sería que alguno de los partidos señalase en público cuánto debe obtener la Generalitat del nuevo sistema de financiación.

Más allá de esto, el acto del sábado será de perfil bajo. No estará presente ni el presidente, José Montilla, ni el consejero de la vicepresidencia, Josep Lluís Carod Rovira, ni tampoco el jefe de la oposición, Artur Mas. Montilla delegará en su consejero de Economía, Antoni Castells, mientras que los partidos enviarán al encuentro a sus responsables económicos, que son los miembros de la parte catalana de la Comisión Mixta de Asuntos Económicos Estado-Generalitat.

El escenario escogido para el acto de protesta, un despacho del departamento de Economía de la Generalitat, reflejará también la escasa solemnidad de la convocatoria. El Parlament y el Palau de la Generalitat se reservan para actos de mayor calibre.

Desde México, la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega, restó importancia al incumplimiento de las fechas y mantuvo que es voluntad del Ejecutivo alcanzar un acuerdo. "Nos hubiera gustado que estuviese ya, pero los temas son más complicados", informa Ana Alfageme.