La Comunidad se interesa por un bar de copas vinculado con el 'caso Guateque'

Cuando en cualquier situación de la vida uno se topa con dificultades lo mejor es recurrir a los amigos. Eso debió de pensar uno de los propietarios del local de copas La Botellita de Serrano, José Almansa, que en una conversación grabada durante la investigación del caso Guateque, reconoce: "He movido hilos para abrir sin licencia su sala de fiestas".

Almansa declara hoy como imputado ante el juez por este asunto y por su relación con uno de los ingenieros investigado por la trama de corrupción, Antonio Sanz Escribano, propietario de la firma de ingeniería AB Sanz Escribano. En una conversación telefónica con éste, Almansa cuenta: "Hemos movido todo a todos los niveles. Por ejemplo, la madre de mi novia es la mejor amiga de Esperanza Aguirre y entonces se han movido ahí los cables en muchos temas", según consta en una conversación grabada en la investigación del caso Guateque en julio de 2007.

Almansa sugiere en las escuchas que tras "mover los hilos", el por entonces edil del distrito, Tomás Pascual (PP), le aseguró que el área no estaba calificada como Zona Ambientalmente Protegida (ZAP), aunque en realidad sí lo está. Un portavoz de la Comunidad de Madrid asegura que la presidenta no conoce de nada a José Almansa ni su bar.

Pero la Comisión de Espectáculos y Actividades Recreativas, dependiente de la Consejería de Justicia e Interior, se interesó por la licencia de este local en agosto de 2007 ante la Concejalía de Urbanismo. Antes, en abril de 2004, también reclamó a Urbanismo información sobre el local, que acababa de pedir un cambio de licencia para ampliar el horario. Fuentes de la concejalía aseguran que no es habitual que la Comunidad se interese por este tipo de locales. Un portavoz de la Consejería de Interior sostiene que su departamento no tiene constancia de ningún expediente a este local. "La Comisión de Espectáculos es un órgano consultivo", precisó. La portavoz explicó que este órgano actúa cuando se producen infracciones graves.

El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, David Lucas, indicó ayer que "es incomprensible que un local con más de 60 sanciones continúe abierto". Y se preguntó con ironía: "¿Por qué sigue abierto? ¿Y por qué se permite que siga abierto?".

La Botellita está en la calle de Serrano, 63. Tiene licencia de funcionamiento desde 2002 como bar con actuaciones y con cierre a las tres de la madrugada. Los propietarios propusieron ampliar el horario hasta las 5.30. Para ello necesitaban una nueva licencia, inviable al estar en un área ZAP. La Botellita sigue abierto y cierra más tarde de las 3.00.