El Consejo Escolar alerta de un posible déficit de profesores a medio plazo
El organismo pide un debate sobre el peso de la concertada en la educación
Si el Gobierno vasco no adopta medidas al respecto, "no habrá suficientes profesores para cubrir la demanda en los centros educativos de la comunidad". Así de tajante se mostró ayer el presidente del Consejo Escolar de Euskadi, Konrado Mugertza, en la presentación de la segunda parte del informe sobre la situación de la enseñanza en el País Vasco para el periodo 2005-2006. "Habrá graves problemas", advirtió Mugertza en Bilbao, debido al que número de docentes que vaya jubilando irá de los casi 600 actuales hasta superar los 1.300 en 2023, según las previsiones del estudio.
Pide un seguimiento de los alumnos según su perfil socioeconómico
El consejo, máximo representante de la comunidad educativa vasca, señala tres factores como causantes de esa posible situación: el crecimiento de la población escolar debido al aumento de la natalidad y de la inmigración, el incremento de la oferta en el primer ciclo de educación infantil, así como de la atención a colectivos que necesiten una ayuda especializada, como los inmigrantes. Y no está claro que los cinco centros de magisterio del País Vasco puedan cubrirla por sí solos. "El problema debería haberse abordado antes. La edad media del profesorado es alta (45 años) y la profesión tiene poco atractivo entre los jóvenes", resaltó el presidente del consejo, que pidió a Educación que "investigue en profundidad" el problema y analice los factores que pueden inducir a los estudiantes a elegir la profesión docente para reforzarlos.
La radiografía de la enseñanza en Euskadi muestra un elevado gasto por alumno (el mayor de España), pero con un "bajo" porcentaje del PIB dedicado al mismo, un 3,8%. El porcentaje es inferior al 5,4% europeo y al 4,3% de España. "Aumentar un punto el porcentaje del PIB supondría un incremento del 30% de los presupuestos de Educación", señaló Mugertza.
El presidente del consejo consideró "prioritario" invertir en la creación de nuevos centros públicos y en mejoras en los existentes, "especialmente" en educación primaria e infantil, debido a que la oferta actual es superada por la demanda y a que se da una mayor concentración de recursos en los últimos niveles, en la segunda etapa de la ESO. El informe también defiende aplicar criterios diferenciales del gasto que permitan canalizarlo hacia donde es más necesario. El consejo aboga por invertir teniendo en cuenta las diferencias socioeconómicas de ciertas zonas de Euskadi y las disparidades entre redes y centros (la pública acoge a estudiantes de familias con menos ingresos). También pide que se invierta de forma distinta en los tramos de edades y etapas para dar un trato más individualizado y preventivo al fracaso escolar.
El consejo también hizo un llamamiento a debatir qué peso debe tener la enseñanza pública y la privada concertada. Euskadi es la comunidad autónoma con mayor implantación de este tipo de colegios (cerca del 50%, según el consejo). La pública y la concertada se han equiparado en financiación, pero los centros privados siguen cobrando cuotas al alumnado, unos 400 euros anuales de media. El consejo reclama al departamento de Educación que "ponga los medios para que se respete el derecho de los ciudadanos a la educación básica realmente gratuita" y recuerda que los presupuestos destinados a la financiación de los centros concertados entre 2003 y 2005 han crecido más que los de los centros públicos, especialmente en Educación primaria y bachillerato.
El informe dibuja una Euskadi con un nivel económico "alto, incluso muy alto", pero con un nivel cultural medio. El consejo quiere que los centros cuenten con dos registros de información referidos a las características del origen del alumnado y a la evaluación de los estudiantes. También ve conveniente la creación de un registro informatizado del alumno, una ficha que permita centralizar la información sobre el itinerario de los jóvenes y sus resultados. Mugertza recordó que el "reto" de la euskaldunización implicará una aportación de recursos económicos y formación "abundantes e importantes".
