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Ricard Giralt Miracle y otros

Se publicó, hace pocos meses, un libro sobre Ricard Giralt Miracle, uno de los fundadores de nuestro diseño gráfico con una obra abundante y, sobre todo, significativa de aquellos años en que incluso las incertidumbres eran gestos creativos. El libro lleva como subtítulo El diálogo entre la tipografía y el diseño gráfico y su autor es J. L. Martín Montesinos. Giralt murió en 1994 y dejó una obra compleja y variopinta, a veces difícil de interpretar como una unidad creativa si no es en la persistencia del manifiesto revolucionario a favor de la tradición del buen oficio y el respeto a sus cánones. Menos difícil de interpretar es la línea de ensayo y aprendizaje con la cual alcanzó, desde distintos puntos de partida, uno de los primeros discursos fundacionales del diseño gráfico. Ahora, con la distancia crítica de esos años tan repletos de acontecimientos culturales, técnicos, gremiales y económicos que han soliviantado el grafismo, podemos interpretar mejor la obra y el discurso de Giralt Miracle. Él y otros de su generación se incorporaron a la modernidad -como hicieron los arquitectos y, en general, todos los diseñadores- en su segunda ola creativa, que era, al mismo tiempo, crítica. Fueron, en cierta manera, postbauhausianos -¿posracionalistas?- y casi partieron de cero superponiendo dos tradiciones: las ideas y los métodos de la ilustración gráfica con la exigencia permanente, normativa de la tipografía. El oportuno libro de Joan Perucho Caleidoscopio. 14 gráficos, publicado en 1968, sitúa aproximadamente esa generación con sendas monografías sobre Pla Narbona, Pedregosa, Gallardo y el propio Giralt. A pesar del tiempo transcurrido, es una referencia indispensable, no sólo histórica, sino programática.

Con la distancia podemos interpretar mejor la obra y el discurso de Ricard Giralt Miracle

La superposición de lo ilustrativo y lo tipográfico, del contenido figurativo y la expresividad del abecedario, había sido ya un método incipiente y dubitativo durante más de un siglo en los diversos modelos gráficos de todo el mundo. Casi sin proponérselo, y quizá sin un propósito teórico demasiado preciso, Joan Junceda fue en Cataluña un maestro indiscutible con sus alfabetos icónicos, sus letras capitales e incluso sus ilustraciones para textos tan dispares como La isla del tesoro y las Pàgines viscudes, de Folch i Torres. Pero si en Junceda -y también en sus contemporáneos catalanes y sus maestros ingleses y americanos- casi siempre el punto de partida está en la ilustración, en Giralt -y en buena parte de su generación- las dos categorías se confunden en una sola, dando incluso prioridad al valor comunicativo del alfabeto. Andreu Balius ha hecho una interesante tarea de investigación -expuesta sumariamente en el FAD con motivo de la presentación del libro que comentamos- para recomponer con ejemplos aislados lo que ha llamado "alfabetos fantásticos" de Giralt Miracle: letras cuyo trazado es una suma de dibujos ilustrativos e ilustraciones que mantienen la estructura de las letras. Es decir, se trata de la creación de un complejo sistema comunicativo -el diseño gráfico propiamente dicho- con la revalorización de dos tradiciones comunicativas: un post-Bauhaus que hay que considerar como el punto de partida de la última generación de diseñadores, los cuales están ahora descubriendo el sorprendente magisterio de Giralt. Un punto de partida, no obstante, que también puede ser nocivo cuando se pone en manos de algunos jóvenes autores que han olvidado ya, por una parte, la cultura del dibujo, y por otra, las exigencias funcionales de la lectura. He aquí uno de los factores que pueden haber influido en las nuevas incertidumbres no sólo del diseño gráfico, sino del diseño en general.

Finalmente, permítanme tres anotaciones de actualidad que, indirectamente, inciden en este tema. Enric Satué -otro importante diseñador y un infatigable investigador que ya pertenece a la generación posterior a la de Giralt- ha publicado un libro excelente cuyo título explica claramente su contenido: Arte en la tipografía y tipografía en el arte (Siruela). Jordi Benito tiene abierta una magnífica exposición en la galería 9MA de Barcelona en cuyos montajes plásticos se introduce el protagonismo de la lectura dentro del tono críptico de la obra de arte. Y en el FAD se puede visitar la exposición Visual Kultur.Cat que hemos heredado de la Feria de Francfort, con una admirable colección de "libros de artista" producidos en Cataluña. Los tres acontecimientos ofrecen temas de discusión alrededor del valor comunicativo de los dos campos creativos que han generado el diseño gráfico: la ilustración y la tipografía, la imagen y la convención codificada. Al fin y al cabo, lo común a la imagen y al alfabeto es la voluntad comunicativa y la calidad artística. Cuando Joan Brossa definía a Giralt Miracle como "jardiner d'abecedaris", hacía coincidir en un único oficio la forma y el contenido.

Oriol Bohigas es arquitecto.

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