El infierno está aquí
Sin necesidad de acudir a los códigos de relato sobrenatural, casi cada día los periódicos se hacen eco de algún suceso que parece directamente inspirado por el diablo. Acontecimientos que, si se indaga lo suficiente, pueden quedar desvestidos de su carga de truculencia amarillenta para, en cambio, envolverlos con razonamientos más o menos perversos. Justo lo que hizo alrededor de un asesinato múltiple acaecido en los años ochenta, en Bogotá, el escritor Mario Mendoza con su novela Satanás (Seix Barral), ahora adaptada al cine por el también colombiano Andrés Baiz.
Formado cinematográficamente en Hollywood en tareas de producción, Baiz ha optado por un relato coral de ritmo no siempre constante en el que se desmenuza la cotidianidad de un grupo de personas acosado, más que por la incertidumbre o el desasosiego, por el terror más mundano: un sacerdote extenuado por los pensamientos impuros de la carne; una chica que se ve obligada a ejercer de gancho sexual para posteriores robos, y un ex militar con conciencia de ángel vengador en la sociedad del desamparo. Tanto en los escenarios como en los juegos con las luces y las sombras, Baiz utiliza en todo momento una simbología cristiana más explícita que sutil, pero el desarrollo del triángulo de historias nunca es errático. Dentro de la ilógica de los comportamientos, la línea argumental adquiere la lógica de los estados de decrepitud que van llevando hacia el estallido, y Baiz hace bien al no mojarse moralmente con el comportamiento de sus criaturas. Son así y punto. Seres (in)humanos. En cambio, es en el cruce de las historias donde la película se hace más forzada, sobre todo en la presencia de todos ellos en el escenario final de la matanza, filmada eso sí con la sequedad necesaria como para impregnar a sus personajes de la sensación de no saber si se está despierto o en la peor de las pesadillas.
SATANÁS
Dirección: Andrés Baiz.
Intérpretes: Damián Alcázar, Marcela Mar, Blas Jaramillo, Teresa Gutiérrez.
Género: drama. Colombia, México, 2007.
Duración: 95 minutos.
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