La crisis no afecta a las rebajas
La Gran Vía de Bilbao estaba más transitada de lo normal el día de ayer. Por la calle, manos cargadas de bolsas; en las tiendas, largas colas de pacientes compradoras y compradores sin demasiadas prisas. Las rebajas llegaron, y la crisis parece que no se nota.
En las grandes tiendas de ropa de la Gran Vía los enormes carteles anunciando saldos impedían ver el interior de unos establecimientos un poco más bulliciosos de lo normal. Susana, encargada de uno de ellos, comenta que la mañana ha estado "tranquila". Sin embargo, "por la tarde ha habido bastante gente. Ni más ni menos que otros años". Los clientes siguen, un año más, con ganas de gastar.
"Las rebajas funcionan siempre bien". Son palabras de Juan Carlos Ramos, portavoz de El Corte Inglés. "El primer día ha estado tranquilo, aunque creemos que este año será igual que los anteriores". Las dificultades económicas pueden notarse, pero en beneficio de las ventas. "Al ser los precios más competitivos en esta época, la gente que no ha gastado mucho y tiene dinero ahorrado prefiere gastárselo ahora", afirma Ramos.
Pilar regenta una pequeña tienda de ropa infantil en el Casco Viejo, y para ella las rebajas no han supuesto un gran cambio en su día a día. "Mis clientas habituales ya saben que llevo casi un mes con ofertas. Además, el primer día de rebajas nunca es significativo en el Casco Viejo". Sostiene que la Gran Vía se lleva casi toda la clientela durante estos días, aunque apunta que, según los comentarios de sus clientas, allí tampoco han tenido una jornada como para tirar cohetes. "Las tiendas llevan ya más de un mes con ofertas; la gente no va a comprar mucho más de repente". La encargada de una tienda de ropa cercana a la de Pilar tiene una idea diferente. "La mañana ha estado floja, pero por la tarde ha habido mucho trabajo y esperamos mucha gente durante la semana". Las rebajas parecen haber llegado con más intensidad para unos que para otros.
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