Telemadrid se apaga otra vez

"Tres, dos, uno... ¡Negro!", retransmite una de las directivas de Radio Televisión Madrid (RTVM) desde el estudio. A las 12.46, el ordenador da el paso automáticamente al plató de Alto y claro, donde espera Curry Valenzuela. De nuevo, no hay técnico que pinche la cámara. "¡Es un día de fiesta! ¡Viva la libertad de expresión!", aplaude un sindicalista ante el negro inmenso que se ve en las pantallas. Hasta hoy al mediodía, ésa será la escena: negro en la televisión, silencio en la radio. Algo que a nadie pilla de nuevas: es la segunda vez en una semana que Telemadrid se apaga, y la tercera en la historia de la televisión de España. Sólo TVE vivió un apagón similar, en la huelga general del 14 de diciembre de 1988. El motivo es el desacuerdo en la negociación del convenio colectivo.

Sindicalistas y directivos asistieron juntos al apagón de la televisión

A las doce, el panorama era desolador en el edificio

La de ayer es la enésima convocatoria de huelga del ente público. Ya en 2004, 2006 y 2007 los trabajadores intentaron cortar la emisión en Telemadrid por la "manipulación informativa" a la que se han visto sometidos desde que llegara a la dirección Manuel Soriano, ex jefe de prensa de Esperanza Aguirre. Aunque Soriano se fue el año pasado, y aunque la protesta de ayer nada tiene que ver con la línea editorial del medio, subyacía en las quejas de los periodistas la falta de imparcialidad en la elaboración de las informaciones. Después del aniversario del 11-M, algunos trabajadores se negaron incluso a firmar sus reportajes.

El resto de los que asistieron al apagón de ayer en el estudio, una decena entre directivos y sindicalistas, contaban que las caras eran muy largas. "Impresiona mucho la pantalla en negro", se lamentaba un responsable de CC OO. "Yo tengo el cuerpo malo de verlo", respondía una directiva. Y eso que aún les quedaban 23 horas con el rótulo: "Las emisiones programadas para el día de hoy en Telemadrid y en Onda Madrid están siendo alteradas por la huelga convocada por los sindicatos CC OO, UGT y CGT ante la falta de acuerdo en la negociación colectiva y los servicios mínimos". Exactamente el mismo que informó de la huelga del martes pasado, convocada por el mismo motivo. Esta vez, el apagón ya estaba previsto, incluso en la parrilla interna.

Onda Madrid se quedó en silencio al mediodía, cuando empezó el paro. La televisión aguantó unos tres cuartos de hora más gracias a la serie Missing, emitida después del magacín Buenos días, Madrid, a las doce menos cinco.

El día anterior, los sindicatos y la dirección se habían visto las caras en una reunión que duró 11 horas, hasta las diez y media de la noche. El PP volvió a achacar la falta de entendimiento a que los sindicatos actúan como "agitadores políticos en defensa del PSOE", según dijo a Efe el portavoz en la comisión de RTVM, Benjamín Martín.

En cuanto al seguimiento, para los sindicatos, más del 90% de los trabajadores hizo huelga. Según la empresa, se quedaron en un 66% (cuatro puntos más que la vez anterior). Lo cierto es que ayer, en el edificio de RTVM, en la Ciudad de la Imagen, cuando sonaron las doce, todos empezaron a levantarse de sus sitios. Unos minutos después, unos 200 trabajadores estaban reunidos en la puerta, gritando y pidiendo la mejora de su situación laboral.

El panorama dentro del edificio era desolador. Hasta la cafetería estaba prácticamente vacía. En Onda Madrid, apenas cuatro personas trasteaban en los ordenadores. En el área de programación de la televisión, lo mismo. Sólo en la redacción de informativos había algo de ambiente, con 18 personas trabajando (cerca de la mitad de la plantilla de un día normal). Frente a la puerta, un cartel decía: "Aquí se manipula la información".

"Los que más secundan este tipo de paros son los técnicos, y si ellos no trabajan, es imposible salir al aire", explicó un portavoz del ente, que aseguró que a partir de ahora, cada vez que los sindicatos decidan ir a huelga, si no se pactan los servicios mínimos, tendrán que ir a negro. Una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid que anuló los servicios mínimos que la cadena impuso en una huelga similar en 2006 les impide establecer servicios mínimos. "Y la sentencia vincula a cualquier televisión", subrayó.