Elorrio vota autodeterminación y obvia el último asesinato.

El Ayuntamiento de Elorrio se convirtió ayer en el noveno de los once en que ha sido discutida en Euskadi que rechaza la moción "ética" presentada por PNV y PSE para pedir la dimisión de los ediles que no condenen a ETA. El pleno, celebrado mientras en Vitoria se veleba el cadáver de la última víctima de la banda, concluyó con incidentes que se saldaron con un radical detenido, acusado de agredir a un agente de la Ertzaintza, informa Efe.

En la sesión, los representantes de ANV no hicieron ninguna referencia al atentado de Legutiano y presentaron una moción alternativa, que fue aprobada con sus votos, en la que reclaman el derecho a la autodeterminación y la territorialidad de Euskal Herria.

Numerosos simpatizantes de la izquierda abertzale acudieron al pleno y tacharon de "fascistas" y "terroistas" a los concejales del PNV y el PSE. De forma constante, y pese a las continuas llamadas al orden del alcalde, Niko Moreno, de ANV, interrumpieron a gritos a la portavoz socialista, Mari Carmen Muñoz, y la del PNV, Ana Otadui, cuando intervinieron para defender la moción "ética".

El edil independiente, José Antonio Alcorta, presentó una propuesta alternativa, que fue desestimada, en la que rechazó la violencia, pero mantuvo que la de ETA no es la única.

Antes de dar por concluida la reunión, que finalizó con una salva de aplausos y gritos de "ANV aurrera" ("ANV adelante"), el alcalde llamó a actuar "con responsabilidad" para lograr un "marco en que tengan cabida todos los proyectos".

Tras el pleno, simpatizantes de la izquierda abertzale aguardaron a los ediles del PNV y a otros asistentes para descalificarles a su paso, momento en el que varios fueron acorralados y se produjo un forcejeo. Agentes de la Ertzaintza intervinieron para disolver a los congregados y detuvieron a uno de ellos por atentado contra la autoridad.