Camps acude en ayuda de Arenas y se opone a recortar la solidaridad

El PP presume de decir lo mismo de financiación en Barcelona que en Sevilla o en Vigo, aunque los acentos de sus dirigentes y gobernantes suenan tan distintos como el castellano en esas tres ciudades. Ayer el vicepresidente y consejero de Economía de la Generalitat valenciana, Gerardo Camps, habló en andaluz y acudió en ayuda del presidente del PP de Andalucía, Javier Arenas, para mostrar indirectamente su rechazo a una parte de la propuesta del Gobierno tripartito catalán.

Valencia mostró hace días su "plena coincidencia" con Cataluña

Éste pretende limitar el fondo de suficiencia (la llave de solidaridad de todo el modelo) a tres servicios esenciales (educación, salud y servicios sociales), de modo que sólo se financie el 65% y el 75% de las necesidades de gasto de las comunidades.

"No hace falta tocar el fondo de suficiencia", dijo claro y alto Camps. "Andalucía desgraciadamente está enchufada al fondo de suficiencia. Es básico para nosotros, no se puede reducir", subrayó Arenas. El pasado 23 de abril, el consejero valenciano subrayó, con acento de Barcelona, su "plena coincidencia con los planteamientos y el diagnóstico sobre financiación autonómica" de Antoni Castells, el consejero catalán de Economía. A ambas comunidades les urge un nuevo acuerdo básicamente por el aumento de población en estas comunidades, al igual que a Andalucía. El pasado día 4, el vicepresidente primero del Consell, Vicente Rambla, dijo haber acordado con Cataluña "las bases" de la reforma del modelo de "que tenga en cuenta la realidad poblacional a la que hay que financiar". Esta teórica alianza ha puesto en un brete a Arenas.

La población es el criterio básico que defienden en Andalucía todos los partidos y así está fijado y acordado en el Estatuto. Arenas y Camps enfatizaron ayer que debe ser el elemento "principal". Ambos defendieron la multilateralidad del acuerdo en el seno del Consejo de Política Fiscal y Financiera ("no hay bilateralidad que valga", dijo Camps) y la duplicación del Fondo de Compensación Interterritorial (FCI) destinado a gastos de inversión para las comunidades menos desarrolladas y del que Andalucía es la principal receptora.

Estas palabras se escucharon en unas jornadas montadas por el PP andaluz en Sevilla, pero no hubo un documento conjunto como anunciaron los populares andaluces. Tampoco preguntas de los periodistas, sino monólogos de Camps y Arenas.

Ambos introdujeron la necesidad de a la par de acordar un nuevo sistema de financiación abordar también el de la financiación municipal. El PP andaluz presentará la semana próxima en el Parlamento una proposición de ley para regular la participación de los ayuntamientos en "los ingresos" de la comunidad autónoma. Sin embargo, el Estatuto de Autonomía habla de regular la participación de las entidades locales en "los tributos" de la Junta, es decir, una bolsa que pesa bastante menos que la de los ingresos.