Mascarillas blancas contra el humo negro
Los agentes de tráfico de Madrid se taparon ayer la boca y la nariz con mascarillas antipolución con el fin de exigir al Ayuntamiento medidas para mitigar la contaminación que tienen que respirar al gestionar la circulación en una ciudad con más de tres millones de habitantes. La iniciativa de ayer partió de los sindicatos, que, aprovechando el Día Internacional de la Salud en el Trabajo, repartieron 450 mascarillas entre los 700 trabajadores. Exigen al Consistorio una evaluación de riesgos. Los coches, según el propio Ayuntamiento, emiten el 75% de los gases contaminantes de la ciudad. En la fotografía, dos de los cuatro agentes que regulan el tráfico en la plaza de España, uno de los puntos de la capital en los que se concentran más coches.