El avión pierde un 9% de pasajeros con el AVE entre Madrid y Barcelona
El bajón se agrava hasta el 21% sin descontar el efecto de la Semana Santa
Primer parte de guerra entre AVE y avión en la línea Madrid y Barcelona: 187.174 pasajeros aéreos menos entre las dos mayores ciudades españolas en un mes completo desde el estreno respecto a marzo de 2007, según los datos del gestor de los aeropuertos. Un bajón del 21% que las aerolíneas atribuyen a la Semana Santa, que reduce de forma significativa todos los años los pasajeros aéreos en esa ruta.
Iberia restringe su oferta doméstica ante la competencia "feroz y mortal"
Si se descuenta ese efecto (comparando con abril o mayo del pasado año), la pérdida para el avión sería de algo más del 9%. Una erosión considerable del mercado del mayor puente aéreo de Europa, pero que podía ser mucho peor ya que el viajero urgente se encuentra a menudo con que no hay billetes de tren y tiene que recurrir al avión, según reconocen en Renfe.
Aunque las compañías que operan en esa ruta consideran que es pronto para evaluar el impacto del nuevo competidor terrestre, los primeros datos muestran que la primera batalla ha sido menos cruenta que la librada en el corredor Madrid-Málaga. El primer mes de funcionamiento del segundo AVE andaluz (enero) el avión perdió un 14% de clientes. En febrero y marzo el ferrocarril de alta velocidad ha hecho perder al avión entre ambas ciudades un 9% de viajeros respecto a 2007.
El AVE entre Barcelona y Madrid tuvo en su primer mes de funcionamiento 383.168 usuarios en ambos sentidos, según la operadora ferroviaria. La oferta de trenes es rígida y con las actuales frecuencias y una ocupación del 70% de media no puede rivalizar de momento con el avión en disponibilidad.
Tanto en precio como en tiempo necesario para completar el viaje las espadas están bien altas, pero mientras el tren ofrece 17 frecuencias diarias por sentido, las aerolíneas suman más de 70 en cada dirección.
Y para mantener esa competencia las cuatro compañías que vuelan entre las dos mayores ciudades se aplican ya hace muchos meses en ajustar su oferta, y mejorar sus productos. Iberia no reduce frecuencias de momento (hasta 45 por sentido), pero utiliza ya aviones de menos capacidad y trata de mimar más al pasajero de business.
De hecho Iberia ha acelerado su estrategia de retirada del mercado doméstico mientras espera que el grupo nórdico SAS decida si le vende Spanair. Acumula un recorte de la oferta del 13% durante el primer trimestre respecto al pasado año, y aun así ha perdido un 13,6% de clientes en los vuelos nacionales. El presidente de la aerolínea, Fernando Conte, vaticina que la competencia en la ruta "va a ser feroz y mortal no sólo entre las compañías aéreas que lo operan, sino con el AVE", "el competidor más formidable", informa Amanda Mars.
"Me preocupa que sea una compañía estatal [Renfe] y por eso pedimos que las cuentas estén segregadas y sean rentables, porque sus competidores son privados y no recurren en sus cuentas a los impuestos de los ciudadanos", se despachó ayer en Barcelona, donde puso la primera piedra de un hangar de mantenimiento. La operadora ferroviaria dejará de recibir dinero de las arcas públicas en 2011, según establece el contrato-programa con el Estado.
Air Europa es la única de las cuatro que da datos: entre un 5% y un 7% menos pasajeros en esa ruta desde la entrada del AVE. De momento no se plantea reducir sus frecuencias (seis por sentido). Spanair prevé que la alta velocidad le quite hasta el 25% de sus pasajeros, por lo que también apuesta por ajustar la oferta (tiene 20 vuelos en cada dirección) y apostar por el pasajero de negocios.
Vueling, con una media de siete frecuencias diarias, asegura que de momento no hay una reducción importante y sólo prevé los ajustes normales de la oferta en verano.
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