45.000 trabajadores de Castellón, pendientes de sus convenios

Más de 45.000 trabajadores de la provincia de Castellón están pendientes de la negociación de sus convenios colectivos. Los sectores del azulejo, de transporte de mercancías y de viajeros, los consignatarios, hostelería y turismo y textil están pendientes de la firma de las bases que regirán sus condiciones labores en los próximos años. Los más problemáticos son los del azulejo (25.000 empleados) y transporte de mercancías (4.000). Los sindicatos mayoritarios, CC OO y UGT, han convocado para hoy una manifestación que llegará hasta la sede de la patronal cerámica, Ascer, en protesta por el bloqueo en la negociación, tras más de diez reuniones. Según el secretario general de MCA-UGT en la Plana Alta-Maestrat-Els Ports, Vicente Chiva, las posturas están "muy distantes" ya que algunas propuestas de la patronal, como la flexibilidad laboral o la congelación de la antigüedad "son inaceptables".

También el convenio del transporte de mercancías por carretera está bloqueado después de más de dos meses de negociación. La vigencia del acuerdo es, como en el sector del azulejo, uno de los puntos de discrepancia entre patronal y sindicatos.

Tras cuatro reuniones, uno de los sectores en los que se han acercado posturas es el de la hostelería y turismo (15.000 empleados), tal como señaló la secretaria de acción sindical de Comercio, Hostelería, Turismo y Juego de Millars-Plana Alta de UGT, Patricia Puerta, quien indicó que los empresarios parecen estar dispuestos a aceptar la propuesta de que el sueldo de la categoría más baja del sector alcance, como mínimo, los 1.000 euros en el último año del convenio, mientras que la plataforma estaría de acuerdo en que el nuevo marco laboral sea de cuatro años.

"Positivo" fue, en opinión de UGT, el primer encuentro entre los sindicatos y la patronal del transporte de viajeros por carretera (400 empleados) para negociar el nuevo convenio colectivo. Los empresarios se mostraron partidarios de introducir la Ley de Igualdad para facilitar la conciliación de la vida laboral y familiar y abogaron por firmar un convenio de tres años y buscar fórmulas para que los trabajadores mantengan el poder adquisitivo.

Los consignatarios (200 trabajadores) comenzaron hace 10 días la negociación, que no parece problemática, mientras que los 800 empleados del sector textil de Castellón están pendientes de los acuerdos a nivel nacional.