'Le Monde' faltó ayer en los quioscos por una huelga

Por segunda vez en su historia, Le Monde no acudió ayer a la cita con sus lectores a causa de una huelga. Los trabajadores del diario de referencia francés -participado por PRISA, la sociedad editora de EL PAÍS, en un 15%- protestan contra el plan de reestructuración que contempla una reducción de plantilla de la Sociedad Editora de Le Monde (SEM) de hasta 130 personas, de ellos 85 puestos de periodistas, una cuarta parte de la Redacción, y 45 en otros departamentos.

Los trabajadores, reunidos en asamblea general, votaron ayer por 252 votos a favor, ninguno en contra y cuatro abstenciones exigir a la empresa que descarte despidos forzosos y elabore un nuevo plan de reestructuración. La crisis de Le Monde se inscribe en la crisis general de la prensa parisiense, que vio cómo el aumento de difusión que vivió el año pasado no iba acompañado por un aumento de los ingresos por publicidad, sino por una reducción de los mismos.

El grupo Le Monde, que además del diario edita publicaciones como Cahiers du Cinéma, Telerama o Courrier International y participa en varios periódicos regionales, cuenta con cerca de 1.600 trabajadores, de los que 600 forman la plantilla del periódico. Arrastra una deuda de 150 millones de euros y el pasado ejercicio perdió 15,4 millones. En 2005 ya se redujo la plantilla con la salida pactada de 200 trabajadores.

El plan actual contempla ingresar en torno a 90 millones de euros por la venta de los periódicos regionales, de los que 53 millones serían destinados a reducir la deuda. También se prevé vender publicaciones deficitarias como Cahiers du Cinéma. La dirección, liderada por Eric Fottorino, pretende ahorrar 15 millones de euros en dos años, alcanzar el equilibrio financiero en 2009 y generar beneficios a partir de 2010.