Freno a las grandes promociones

Ante la difícil situación que atraviesa el sector, y dentro de una espiral de reducción de costes, la compañía ha puesto el freno a determinadas promociones que estaba realizando. Es el caso de la Urbanización Costa Miño Golf, la actuación urbanística residencial más grande de Galicia, que se extiende sobre 1,5 millones de metros cuadrados en el mencionado municipio coruñés y que consta de casi 1.300 viviendas y parcelas para edificar. Cuando ya se lleva vendido cerca del 80% de esta promoción, los responsables del departamento de obras de Martinsa-Fadesa en A Coruña han decidido no comenzar ni rematar más viviendas mientras no estén previamente comercializadas, una fórmula a la que hasta ahora no habían recurrido. Esta situación afecta, según las fuentes de la empresa consultadas, a unas cien viviendas, "de ahí que se vean muchas estructuras al aire, simplemente con los cimientos".

La inmobiliaria rompió hace un año el contrato que tenía con ACS para ejecutar parte de la obra, asumiendo el resto a través de subcontratas. Ante el freno en la recta final de la promoción, el alcalde de Miño, el popular Juan Antonio Maceiras, advirtió que "la obra se finalizará, sea con Fadesa o con sus acreedores", y señaló que actualmente está llevando a cabo negociaciones con posibles operadores para la adquisición de los terrenos que la compañía todavía tiene en venta para levantar tanto el hotel como un centro comercial que se ubicarán dentro de la urbanización.

Fadesa se encuentra a la espera de la decisión del Tribunal Supremo tras haber recurrido una sentencia del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia que estimaba el recurso presentado por un grupo de unos noventa afectados relativo a la adjudicación de la concesión para la realización del macroproyecto urbanístico, a la que en su día sólo se presentó Fadesa. Se trataba de la primera expropiación que se realiza en Galicia para acometer una urbanización privada con venta obligatoria del suelo a seis euros el metro cuadrado.