El hijo de la víctima y su homicida vivirá con un tío
Gonzalo, el hijo de cuatro años que Sylvina Bassani tenía con su presunto asesino, Javier Lacasa, vivirá previsiblemente con el hermano de la mujer argentina. "El familiar está dispuesto a hacerse cargo del niño", explicó un portavoz de Servicios Sociales de la región. Ahora falta que los técnicos de menores estudien el entorno socio económico del hombre y "vean la aceptación por parte del niño", explicó esa misma fuente. El tío del niño, también argentino, reside en Italia y está ya camino de España para cuidar del menor.
El que fuera abogado de Sylvina durante su divorcio y las distintas denuncias por malos tratos, Roberto García, expresó ayer el deseo del familiar de hacerse cargo del menor. "Es lo mejor para el niño", dijo. Sobre la familia paterna, García aseguró que no tenía ninguna relación con el niño desde septiembre de 2006, cuando se iniciaron los trámites de divorcio. "Y podrían haberlo hecho, porque no había ninguna prohibición para que estuvieran en contacto con él", aseguró.
Mientras, Gonzalo sigue en la casa de los vecinos y amigos de Sylvina, y su pareja, Andrés, en la localidad de Alovera, Guadalajara. La Junta de Castilla La-Mancha asumió la tutela del menor el mismo jueves, pero consideró que la mejor opción era que se quedara con los amigos de su madre: "Es menos traumático seguir en su entorno, cerca de su casa, que trasladarlo a un centro de acogida".
Los cuerpos de la pareja y su presunto asesino fueron trasladados el jueves a Guadalajara. Familiares, amigos y compañeros de trabajo velaron ayer en la Sala 1 a Sylvina Janette y a Andrés Marzal, ambos tiroteados por el ex marido de la mujer argentina, Javier Lacasa, que luego se suicidó. Durante todo el día, los más allegados a la pareja estuvieron entrando y saliendo de los servicios funerarios. Entre ellos, una decena de militares, muchos vestidos de uniforme, despidieron a Andrés, que era teniente destinado en la prisión de Alcalá Meco. Nadie quiso hablar con la prensa. "Están muy afectados. Sólo quieren velar a sus seres queridos", explicó García sobre la familia de la mujer.
De los amigos de Lacasa no había rastro. Sus familiares, si estuvieron, no se identificaron como tal. El cuerpo permaneció en el centro hasta última hora.
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