Rajoy: "Ya sé quién será portavoz, pero no se lo he dicho ni a ellos"

Peor aún que el cuaderno azul de Aznar. Y además en la oposición. Mariano Rajoy ha decidido someter a los suyos, o al menos eso aseguró ayer públicamente, a la tortura de tener que esperar al último día para saber si son los elegidos como portavoz en el Congreso -un puesto clave para un partido que no gobierna-, en el Senado y en las distintas comisiones.

Las quinielas siguen donde estaban, aunque cada vez cobran más fuerza en las especulaciones de los populares en torno a Juan Costa y Soraya Sáenz de Santamaría. En las últimas horas la mayoría de los dirigentes consultados asumían que Rajoy no había tomado una decisión definitiva, la única manera de explicar un silencio que está desatando todos los rumores y desquiciando al partido. Pero ayer el líder se encargó de desmentir esa idea: "Sí, lo tengo pensado pero no se lo he dicho a nadie, ni siquiera a ellos", señaló en Calahorra (La Rioja), en un viaje organizado a última hora para visitar la zona del atentado de ETA.

"El lunes se reunirá la Junta Directiva Nacional y no me parece serio estar contando por ahí cuáles son las propuestas que les voy a hacer", aseguró. El mutismo en público estaba previsto, pero algunos dirigentes mostraban su extrañeza porque esté dispuesto a no hablar ni siquiera con los afectados.

Ser portavoz parlamentario de la oposición no es cualquier cosa. Implica una decisión personal delicada. No sólo porque requiere dedicación permanente -"no es un lugar en el que te puedas escapar tres días por un viaje familiar", explica un dirigente-, sino, sobre todo, porque significa arriesgar a una carta toda una carrera política, como ha demostrado el caso de Eduardo Zaplana. Es el puesto de máxima exposición, el que tiene la responsabilidad de hacer de policía malo para que el líder pueda hacer de bueno. Y el que se lleva todos los golpes. Por eso muchos creen que es poco probable que Rajoy espere hasta el lunes y no le ofrezca a los elegidos al menos una horas para consultarlo con la almohada.

Rajoy evitó en Calahorra criticar al Gobierno y se ofreció para apoyarle en "todo aquello que signifique la apuesta por la derrota de ETA y su liquidación definitiva". El líder del PP se mostró dispuesto a respaldar a los socialistas si presentan mociones de censura contra ANV.

Mientras, desde Argentina, donde también está Esperanza Aguirre, presidenta de la Comunidad de Madrid, el ex presidente del Gobierno José María Aznar aseguró al diario La Nación que el PP debe tomar las "decisiones adecuadas para afrontar el futuro". Aunque recuerda que corresponde a los órganos del partido decidir si Rajoy es el líder indicado, Aznar cree que el actual presidente del PP es "una persona llena de virtudes, de capacidades y de plenas condiciones".