La ONU sólo tiene ayuda alimentaria para cinco semanas

El Programa Mundial de Alimentos de la ONU necesita reunir 324 millones de euros en las próximas cinco semanas. El programa, que alimenta a 73 millones de personas en 81 países, está en peligro por la escalada de precios de los alimentos, así que ha mandado una carta haciendo un llamamiento de emergencia a los países donantes para intentar reunir el dinero, según publicó ayer el diario Financial Times. Si no lo consiguen antes del 1 de mayo, tendrán que empezar a racionar la comida, a recortar "las raciones para aquellos que confían en el apoyo mundial en momentos de lamentable necesidad", dice el texto de la carta.

"Instamos a su Gobierno a ser todo lo generoso que pueda para ayudarnos a cerrar este agujero, que el 25 de febrero ascendía a 500 millones de dólares [324 millones de euros] y que sigue creciendo diariamente", continúa el texto. Con esa cantidad, el programa alcanzaría en 2008 los 2.200 millones de euros, cantidad similar a la que gastó en el año 2000.

España es uno de los países donantes del programa, pero fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores no pudieron confirmar ayer si habían recibido la misiva. Sin embargo, Alemania anunció una aportación extra de tres millones de euros -este año tenía previstos 23 millones-, según un comunicado de la ministra de Cooperación Económica y Ayuda al Desarrollo, Heidemarie Wieczorek-Zeul, informa Efe. "Esperamos que otros países sigan nuestro ejemplo", dijo la ministra. De momento, España no dirá nada hasta comprobar la recepción de la carta. El año pasado fue el 19º país donante con algo más de 19,15 millones de euros.

La ONU ya ha alertado en los últimos meses de la necesidad de tapar el agujero de 324 millones de euros y de que las reservas del programa se encuentran a su nivel más bajo en 30 años, con sólo 53 días de reservas para emergencias. Pero es la primera vez que marca un horizonte temporal tras el que empezará el racionamiento si no lo consigue. Los expertos han señalado como causas de la escalada de los precios de los alimentos, además de la demanda de las economías emergentes, como China e India, al aumento de las inundaciones o la demanda de cereales para la producción de biocombustibles.