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Atascos kilométricos en la A-8 a Cantabria, en Armiñón y en la frontera de Biriatou

Mikel Ormazabal

El segundo y último día de la operación salida de Semana Santa registró ayer mayores atascos que en el martes, aunque sin accidentes de importancia, al menos hasta el cierre de esta edición. Las principales retenciones se registraron en la A-8 en dirección a Cantabria, donde alcanzaron a media tarde los 20 kilómetros de longitud. El tráfico fue muy lento entre Santurtzi y Muskiz por la gran cantidad de vehículos que se dirigían a la comunidad vecina. Las fuertes aglomeraciones también se reprodujeron en las salidas de la capital vizcaína y en la misma autopista a su paso por Sestao.

Otro punto problemático fue la confluencia de la N-I y la AP-1 en Armiñón, hacia Madrid, donde se formaron colas de 16 kilómetros en los momentos de mayor afluencia de vehículos. A partir de las 13.30 las caravanas fueron reduciéndose y el tráfico recuperó la normalidad hacia las 15.00, según precisó Interior.

En Guipúzcoa se registraron retenciones por la mañana en el paso fronterizo de Biriatou de la A-8, en dirección a Francia. Las retenciones llegaron a seis kilómetros en esta autopista. El colapso llevó a muchos conductores a hacer la ruta por la N-I, donde también se produjeron colas en la variante de Irún.

Pese a la gran intensidad circulatoria, en las vías principales no se produjo ningún accidente de gravedad, según comunicó la Ertzaintza. En las carreteras de Navarra tampoco hubo ninguna incidencia. Los conductores pueden informarse de la situación vial llamando al número de teléfono 902 112 088.

Respecto a la situación del tiempo, para hoy se espera un aumento de la nubosidad y precipitaciones débiles y dispersas. Habrá riesgo de heladas en toda la región y la nieve podría aparecer por encima de los 600 metros. Las temperaturas volverán a bajar hasta situarse por debajo de los 10º, según el pronóstico de la Agencia Estatal de Meteorología.

A partir de mañana se prevé un empeoramiento generalizado del tiempo que va a afectar especialmente a la zona norte de la Península. Mañana, viernes, será un día frío y lluvioso, y podría nevar por encima de los 400 metros. La llegada de un frente polar hará bajar los termómetros y se volverá a una situación puramente invernal, con riesgo de heladas y vientos que podrían llegar a los 90 kilómetros por hora.

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Esta situación se prolongará durante todo el fin de semana. El sábado y el domingo se esperan fuertes chubascos y tormentas en todo el País Vasco. El viento soplará del norte con rachas de bastante intensidad.

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Sobre la firma

Mikel Ormazabal
Corresponsal de EL PAÍS en el País Vasco, tarea que viene desempeñando durante los últimos 25 años. Se ocupa de la información sobre la actualidad política, económica y cultural vasca. Se licenció en Periodismo por la Universidad de Navarra en 1988. Comenzó su carrera profesional en Radiocadena Española y el diario Deia. Vive en San Sebastián.

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