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Bush fija una cita con el presidente en abril

Miguel González

A nueve meses de desalojar la Casa Blanca y con cuatro años de retraso, el presidente de EE UU, George W. Bush, y el jefe del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, se entrevistarán entre el 2 y el 4 de abril en Bucarest (Rumania), aprovechando la cumbre de la OTAN a la que ambos asistirán. La iniciativa de la reunión partió de Bush, que una de las primeras cosas que hizo ayer desde el Despacho Oval, a las 6.30 de la mañana en Washington, fue llamar al presidente español para felicitarle por su victoria electoral.

Zapatero calificó la llamada de "gesto positivo" y aseguró que su interlocutor había estado "afectuoso". La conversación, que duró algo menos de cinco minutos, la mantuvieron a través de los respectivos gabinetes telegráficos y con ayuda de un intérprete. Según explicó Zapatero, quedaron en "charlar" en Bucarest sobre "aspectos que afecten a intereses compartidos y cuestiones del orden internacional".

Fuentes diplomáticas indicaron que, aunque aún falta por concretar el formato, la duración y el momento en que tendrá lugar el encuentro, se tratará de una entrevista bilateral y no de un intercambio de saludos más o menos fortuito como los que se han producido con motivo de la coincidencia de ambos en foros multilaterales, como la cumbre de la OTAN en Estambul en junio de 2004 o la reunión sobre cambio climático convocada por la ONU en Nueva York en septiembre pasado.

La llamada de Bush produjo sorpresa, ya que había remitido el día anterior una protocolaria carta de felicitación a Zapatero a través de su embajador en Madrid, Eduardo Aguirre. Hace tiempo, además, que el presidente español había renunciado a entrevistarse con el mandatario estadounidense y centraba sus esperanzas en el próximo cambio de inquilino en la Casa Blanca.

Zapatero valoró especialmente el gesto de Bush, recordando que "es conocido de dónde venimos en la relación". Se refería a la animosidad generada por su decisión de ordenar la retirada inmediata de las tropas de Irak, a la que se sumaron posteriores episodios, como la invitación a otros países a que siguieran su ejemplo, formulada por Zapatero en Túnez en septiembre de 2004. Fuentes gubernamentales creen que la relación personal que Bush ha mantenido con Aznar en estos años no ha contribuido a superar los malentendidos, sino todo lo contrario.

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Sobre la firma

Miguel González
Responsable de la información sobre diplomacia y política de defensa, Casa del Rey y Vox en EL PAÍS. Licenciado en Periodismo por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) en 1982. Trabajó también en El Noticiero Universal, La Vanguardia y El Periódico de Cataluña. Experto en aprender.

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