Los musulmanes de Sevilla harán su mezquita en la antigua Expo
El acuerdo zanja el conflicto abierto por la dura oposición de algunos vecinos
Cuatro años después de empezar a reclamarla, los cerca de 7.000 musulmanes que viven en Sevilla tienen desde ayer la promesa de que dispondrán de una mezquita en 2010. La Comunidad Islámica de España y el Ayuntamiento de Sevilla, gobernado por PSOE e IU, acordaron ayer que el edificio se ubicará en una parcela de más de 6.000 metros cuadrados en la avenida de Carlos III, dentro de lo que fue el recinto de la Expo 92 y a escasos metros del estadio de la Cartuja, ese que se construyó cuando Sevilla aspiraba a albergar los Juegos Olímpicos de 2012.
Ésta es la ubicación que han elegido los musulmanes de entre las tres que le ofreció el Ayuntamiento. El solar cumple las dos condiciones impuestas por el gobierno municipal: que la parcela en la que se ubicase la mezquita estuviera actualmente sin urbanizar y que no tenga cerca viviendas. El Ayuntamiento quería evitar así que se repitieran las protestas vecinales que dieron al traste con el anterior proyecto de mezquita, diseñado para el barrio de los Bermejales. El Ayuntamiento y la comunidad musulmana acordaron en 2004 construir aquí el edificio, pero la principal asociación vecinal del barrio puso en marcha una campaña contra la mezquita y empapeló media ciudad con informaciones de prensa en las que se aludía a las supuestas relaciones entre terrorismo e islamismo.
El asunto acabó en los tribunales y, en plena campaña electoral para las elecciones municipales de 2007 y ante el recrudecimiento de las protestas, el gobierno municipal paralizó el proyecto. Pasado y superado el examen de las urnas, PSOE e IU apostaron por reactivar la construcción de la mezquita, pero cambiándola de sitio y asegurándose que no volvieran a encontrarse con reticencias y presiones de los vecinos. Solución: ubicarla lejos de cualquier núcleo de viviendas.
Los musulmanes sólo cuentan ahora con cuatros centros de rezo en Sevilla, emplazados en pequeños locales y naves. Uno de ellos, en el centro de la ciudad, subsiste gracias a Kanouté, el delantero del Sevilla, que ante el retraso del proyecto de mezquita, salió hace unos meses en auxilio de la comunidad musulmana y compró por más de 500.000 euros este centro, que estaba amenazado de cierre.
El presidente de la Comunidad Islámica en España, Malik Ruiz, señaló ayer que el objetivo es que la nueva mezquita sea algo más que un lugar para rezar. "Nuestra intención es que sea una especie de centro cívico, que incluya un centro de interpretación del islam y un punto de encuentro para quien quiera conocer a la comunidad musulmana. Será una mezquita abierta a toda la ciudad".
La parcela elegida por los musulmanes es propiedad de la Empresa Pública de Suelo de Andalucía (EPSA), que negocia su cesión al Ayuntamiento. Cuando ésta culmine (lo que ocurrirá "en breve", según el delegado de Urbanismo de Sevilla el socialista Emilio Carrillo), el gobierno municipal la cederá a la comunidad musulmana para que levante la mezquita. La cesión se firmará por 75 años con posibilidad de prórroga.
La intención de los representantes de los musulmanes es que el edificio esté terminado en 2010. Del proyecto, que empezarán a diseñar en las próximas semanas, sólo saben que quieren que tenga un minarete mirando a La Meca y combine "los cánones de las mezquitas de Al Andalus" con la arquitectura funcional que rodea a la parcela, aledaña al parque tecnológico Cartuja 93.
Un largo camino
- El Ayuntamiento aprobó en 2004 la cesión a los musulmanes de una parcela en Los Bermejales para levantar la mezquita.- Los vecinos iniciaron una campaña contra el proyecto y, en mayo de 2007,el gobierno municipallo paralizó. - Tras las elecciones municipales, se retomó la idea pero cambiandosu ubicación.
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