"La filantropía puede lograr sus objetivos si se vuelve más empresarial"
Larry Brilliant, presidente de Google.org: "No tenemos el estatuto de una fundación. Podemos hacer inversiones, iniciar una industria, financiar individuos, activistas o 'lobbies'. Nuestras restricciones son las de una empresa"
Google.org, el brazo filantrópico de Google anunció a principios del año su primer plan estratégico para mejorar el mundo. Cinco iniciativas para desarrollar energías renovables, acelerar la venta de los coches híbridos, alentar el crecimiento de las pymes, crear un sistema de prevención de enfermedades infecciosas y riesgos climáticos e informar a la gente. Al frente de Google.org está Larry Brilliant, médico, especialista en salud pública.
Pregunta. ¿Qué tienen en común esas cinco iniciativas?
Respuesta. Buscamos campos de acción con tres características: que fueran problemas importantes; que pudiéramos aportar algo diferente de dinero y que fueran áreas en la que no hubiera mucha gente haciendo lo mismo.
"Por primera vez estamos viendo una enorme cantidad de riqueza aplicada de manera empresarial a problemas mayores"
"Produciremos un gigavatio de energía renovable, más que lo que consume Google.Produciremos tanto como el consumo de Madrid y Sevilla"
P. En energías renovables hay muchas iniciativas.
R. Hay mucho dinero, pero viene del mundo del capital de riesgo. España, por ejemplo, ha ofrecido comprar electricidad de energía renovable a 20 céntimos por kilovatio/hora. Quiere decir que si se consigue producirla a 10 centavos el kilovatio/hora, hay negocio. Producir electricidad a partir del carbón cuesta apenas cuatro céntimos el Kw/h y no podemos pedir a China o India que dejen de quemar carbón si es más barato que el viento. Invertimos la forma de pensar: no importa cuánta energía renovable haya, lo que importa es cuánto carbón no se saca de la tierra. Hay que producir energía renovable más barata que el carbón.
P. ¿Y el programa 'prever y prevenir'?
R. Consiste en aplicar la tecnología de Google para la alerta temprana y la predicción de brotes de enfermedades como gripe aviaria, Ébola o neumonía atípica entre otras enfermedades de origen animal a punto de saltar a los humanos.
P. ¿Cuál es el papel empresarial en la filantropía?
R. La filantropía puede lograr sus objetivos si se vuelve más empresarial, probando soluciones de mercado, con objetivos claros, cuantificables y medibles. Las enfermedades de las que estamos hablando o la fractura creciente entre pobres y ricos son suficientes para volvernos pesimistas; pero esos jóvenes filántropos surgidos del éxito emprendedor me hacen ser optimista. Por primera vez estamos viendo una enorme cantidad de riqueza aplicada de manera empresarial a problemas mayores. Algunos dicen que Google es el arquetipo del éxito emprendedor; pero en Silicon Valley la estructura es ideal para iniciar un negocio. Es fácil encontrar un ingeniero, un ejecutivo. Hay capital inicial y capital de riesgo, bancos, abogados que ayudan. Pero en Ghana, ¿Qué hay de esto? Nada. Si podemos encontrar una manera de transferir algunas de esas instituciones y hacer crecer un ecosistema de este tipo en el mundo en vías de desarrollo contribuiremos a exportar cierta capacidad empresarial. Esto es lo que queremos hacer al financiar programas para las pyme.
P. ¿Por qué las pyme?
R. Porque son el motor más importante de creación de empleos. En Estados Unidos, dos tercios de los empleos provienen de las pyme; en África es inferior al 29%. Los empleos provienen de grandes empresas, principalmente dedicadas a la extracción, a la minería. Y ahora de telecomunicación. Es bastante fácil financiarlas. No es difícil encontrar cinco millones de dólares para una gran empresa; también es bastante fácil encontrar microcréditos de hasta 500 dólares; pero nadie está financiando entre 500 y dos millones. ¿Por qué nadie invierte 25.000 dólares en una carnicería? Porque es un negocio final, no hay futura salida a Bolsa, ni fusión ni adquisición. Ahí queremos trabajar. .
P. ¿Google.org puede dar dinero a empresas con fines de lucro, algo generalmente prohibido a las fundaciones?
R. Somos una empresa normal, una división de Google. No hay nada especial si nos consideran una empresa con fines de lucro. Lo diferente es nuestro objetivo: la forma en la que se miden los resultados. No se trata de rentabilidad de la inversión, ni de sus beneficios, se trata de bienes sociales. Al no recibir fondos sin impuestos no tenemos el estatuto de una fundación y, por lo tanto, no corremos el riesgo de perderlo. No lo queríamos. Podemos hacer inversiones, iniciar una industria, financiar individuos, activistas o lobbies. Las restricciones para nosotros son las de cualquier empresa.
P. Google tiene ejércitos de servidores que gastan mucha electricidad. ¿No ve una paradoja en su esfuerzo a favor del medio ambiente?
R. A medida que Google crece, los servidores consumen más electricidad. Tenemos, como mínimo, que producir más energía verde que la que consumimos. Al principio anunciamos nuestra intención de producir 50 megavatios de energía renovable y luego lo subimos a un gigavatio, que es más que lo que consume Google en cualquier circunstancia. Producimos tanto como el consumo de Madrid y Sevilla, o algo así.
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