Los emigrantes deciden dos escaños
El PP arrebatará un diputado al PSOE en Vizcaya y otro a CiU en Barcelona si el voto de los residentes en el extranjero de esas provincias es similar al de 2004
Los inmigrantes han ocupado buena parte de los focos durante la campaña electoral. Tras las votaciones, los emigrantes asumen el protagonismo. El voto de los residentes en el extranjero puede dar al Partido Popular dos escaños extra, con lo que alcanzaría los 155. Si el voto de los emigrantes censados en Barcelona y Vizcaya sigue pautas parecidas a las de hace cuatro años, el PP arrebatará un escaño a CiU y otro a los socialistas vascos (PSE-PSOE).
En las elecciones del domingo hubo siete diputados que se decidieron por un margen inferior a los 4.000 votos. El PP estuvo involucrado en todas esas batallas, con un balance provisional de cinco derrotas y dos victorias. Los populares, sin embargo, esperan el desquite en otros dos duelos.
Uno de ellos es el de Barcelona, que vivió el escrutinio más ajustado. Hasta más allá de las tres de la madrugada no se supo de qué lado caía el último escaño de la provincia. Con el 99,94% escrutado, cuando faltaban sólo por computar una mesa electoral de El Masnou y otra de Cerdanyola del Vallès, la diferencia era de sólo 28 votos. Al final, al PP le faltaron 71 para arrebatarle a CiU ese escaño, que estuvo varias horas bailando.
Ahora, en el recuento del voto emigrante, al PP le pueden bastar menos votos que a CiU. Necesita las 71 papeletas que ahora les distancia y después seis votos por cada siete de CiU. En 2004, la lista de Duran i Lleida logró 4.434 votos en el extranjero. Si se repitiese esa cifra, por ejemplo, al PP le bastaría con lograr 3.871 votos, en aplicación de la ley D'Hondt, de cálculo electoral. En 2004 logró 4.718, lo que le daría un amplio margen.
En Vizcaya la diferencia es algo mayor, pero los cocientes y los precedentes también favorecen al PP, que se quedó el domingo a falta de 582 votos. Ahora necesita esa cifra y, a partir de ahí, le bastan la mitad de los votos que logre el PSE-PSOE, pues lucha por su segundo escaño en la provincia frente al cuarto socialista. En 2004, los populares lograron en Vizcaya 1.680 votos de emigrantes. Para contrarrestar una cifra similar, el PSE-PSOE necesitaría unos 2.200 votos, 1.000 más de los que logró en 2004. Los socialistas no las tienen todas consigo, pero recuerdan que el voto emigrante suele favorecer al partido en el poder.
En las demás circunscripciones no parece que el voto exterior pueda resultar decisivo. El recuento de esos sufragios se realizará mañana, durante el escrutinio general.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.