El paro aumenta en 53.406 personas y llega a su nivel más alto en 10 años
El número de parados sube un 11,5% desde febrero de 2007 - La cifra de desempleados crece el doble en las comunidades del PP que en las del PSOE
La estadística del paro registrado que compila el Ministerio de Trabajo volvió ayer a dar señales nítidas sobre el debilitamiento del mercado laboral. En febrero, el número de parados inscritos en las oficinas autonómicas aumentó en 53.406 personas, para superar los 2,3 millones de desempleados, la cifra más alta desde junio de 1998.
El ministro de Trabajo, Jesús Caldera, admitió que "no es un buen dato", aunque prefirió centrarse en que el aumento mensual del número de parados en febrero (un 2,36%) se ha moderado respecto a enero (6,22%). Claro que en ese mes se alcanzó el mayor repunte mensual del desempleo desde el inicio de la democracia. Caldera también hizo hincapié en la contratación (1,42 millones, récord en febrero) para augurar que en marzo el paro crecerá menos.
El dato es peor que en la desaceleración de 2002, según los expertos
Sólo Baleares y Asturias se libran del incremento del desempleo
"Cada mes que pasa, las noticias son algo peores, está claro que esto ya no es coyuntural", indica José Antonio Herce, experto que elabora el índice laboral para la asociación de agencias de trabajo temporal (Agett). "Los datos del paro registrado son ya peores que los de la última desaceleración de 2002", recalca Herce, que también destaca que la construcción concentra el 30% de los 240.000 personas que se han incorporado a las listas del paro en el último año (un 11,57% más).
Las cifras de paro registrado nunca han sido la mejor radiografía del mercado laboral. Su carácter mensual e inmediato, sin embargo, las convierte en un termómetro ansiado y urgente en comparación con las de la Encuesta de Población Activa (EPA), de periodicidad trimestral. En tiempos de enfriamiento económico y pugna electoral, además, las cifras de paro, sea cual sea su fuente, se convierten en arma arrojadiza. Las difundidas ayer, sin embargo, tienen doble filo. No sólo muestran un notable incremento del paro, también reflejan que ese aumento en febrero fue mucho mayor en las comunidades gobernadas por el PP que en las dirigidas por el PSOE.
La fotografía mensual deja en mal lugar a las autonomías del PP. De las ocho comunidades en que más crece el paro, siete tienen gobierno autonómico del PP (contando Ceuta y Melilla). Sólo se salva de la quema Castilla y León. Justo lo contrario pasa con las del PSOE, con la excepción de Castilla-La Mancha. En Baleares y Asturias incluso cae el número de desempleados. En conjunto, el paro crece un 3,6% en las ocho comunidades con presidente del PP, más del doble del 1,6% que lo hace en las ocho bajo Gobierno socialista.
La mala evolución del paro registrado en las regiones populares se debe básicamente a los datos de Murcia, Madrid y la Comunidad Valenciana. No es fácil sacar conclusiones con los datos de paro registrado, pero los expertos apuntan a una mayor dependencia económica del sector constructor e inmobiliario en esas comunidades. "Es fácil comprobar qué ocurre con zonas de la costa o en grandes ciudades que estos años se han beneficiado de grandes desarrollos inmobiliarios", señala Herce, quien cree que cualquier otra interpretación sería "oportunista". Aun así, resulta llamativo que en otras como Navarra o La Rioja también se hayan producido incrementos tan altos. Ceuta y Melilla tienen menos peso sobre el total, pero sus datos de febrero son aún más escalofriantes: han concentrado en un solo mes, febrero, casi todo el aumento de paro del último año.
El secretario de Economía del PP, Miguel Arias Cañete, achacó las diferencias al distinto rasero que emplean las comunidades en la inscripción de personas sin empleo que solicitan formación para incorporarse al mercado laboral. Este colectivo originó una bronca política hace dos semanas al conocerse que el ministerio y las comunidades habían acordado (en junio) excluirlo de las cifras de paro registrado. "En cada comunidad se está haciendo una cosa distinta, la consejera de Madrid [PP] me ha asegurado que ellos lo siguen computando como paro registrado", señaló Arias Cañete.
Frente a lo que mantiene el Gobierno, el PP insiste en que la decisión sobre dónde inscribir al colectivo de demandantes de empleo sin formación anterior es "voluntaria". En cualquier caso, su limitado número (unos 19.000 en total) hace difícil que sea la única explicación a esas diferencias. Si lo que se toma es el cómputo de los últimos 12 meses, las conclusiones no son muy diferentes. El paro registrado crece un 8,4% en las comunidades del PSOE y un 14,6% en las del PP. Curiosamente, las que no tienen presidente de ninguno de los dos partidos se sitúan justo en el medio.
El paro aumentó por quinto mes consecutivo y en febrero volvió a concentrarse en el sector de los servicios, donde se incrementó en 23.760 personas y en la construcción, donde subió en 12.466; aunque como ya ocurrió en enero hubo repuntes en todos los sectores: en agricultura (8.858), en el colectivo de sin empleo anterior (7.032) y en la industria (1.290).
Como consecuencia del aumento del paro en la construcción, el desempleo subió más entre los hombres (28.636) que entre las mujeres (24.770). También aumentó más entre los mayores de 25 años (44.590 personas) que entre los jóvenes menores de esa edad (8.816).
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