La Casa del Mediterráneo arranca este año en Alicante pese al boicoteo del PP

Una vez más, un proyecto que puede ser trascendente para Alicante se gesta envuelto en polémicas, al igual que ocurrió con la Oficina de Armonización del Mercado Interior (OAMI). Ahora se trata de la Casa del Mediterráneo, un proyecto que anunció el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en la campaña de las pasadas elecciones municipales y que ahora empieza a caminar, pese a las trabas que ha ido planteando el PP. El ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, desveló ayer algunos detalles, como que su ubicación definitiva será el edificio de la antigua Estación de Murcia, en el acceso sur de Alicante por la costa, donde se dispondrá de 3.000 metros cuadrados para oficinas, salones de actos y seminarios. El director del proyecto será nombrado en mayo, y está previsto que se celebren actividades este mismo año, aunque la rehabilitación del edificio no haya concluido. Se está preparando una reunión de expertos sobre el Mediterráneo en Alicante, una reunión en Benidorm de investigadores del cambio climático y otra en Xàbia de juristas. Tras las próximas elecciones generales, está previsto que se aprueben los estatutos del consorcio de la Casa del Mediterráneo, del que forman parte el Ministerio, la Generalitat y los ayuntamientos, con el objetivo de poder encargar el proyecto de reforma. Sin embargo, a la reunión de ayer faltaron tanto el alcalde de Alicante, Luis Díaz Alperi, como el vicepresidente del Consell, Vicente Rambla, que delegaron su representación en un concejal y un secretario autonómico. Los populares tildaron de "electoralista y oportunista" la reunión

El PP critica que el PSOE "solo se acuerde del asunto en campaña"

Aparte de la polémica política entre PP y PSOE sobre la Casa del Mediterráneo, que ya de entrada discreparon sobre su ubicación, ahora la diferencia de fondo se centra en la presidencia del consorcio. La Generalitat quiere compartirla solo con el Gobierno, y Leire Pajín, secretaria de Estado de Cooperación Internacional, prefiere involucrar a los ayuntamientos y que sea rotatoria. La aprobación de los estatutos del consorcio es fundamental para poder ejecutar el presupuesto. El Gobierno tiene una partida de un millón de euros reservada "que se ampliará en función de las necesidades, siempre y cuando estén los estatutos aprobados".

Moratinos aseveró que la Casa del Mediterráneo "es ya una realidad" y un "compromiso con la diplomacia pública". El ministro de Asuntos Exteriores, que compareció junto a Pajín, confirmó que en el borrador de los estatutos que regirán el consorcio se contempla que el presupuesto se reparta un 60% el Gobierno central, un 20% la Generalitat, el 10% el Ayuntamiento de Alicante y un 5% los ayuntamientos de Benidorm y Xàbia. Los estatutos está previsto que se aprueben tras las elecciones del 9 de marzo. A partir de ese momento, se podrán organizar actividades y aprobar presupuesto para las obras de rehabilitación.

Sin embargo, los máximos representantes del PP esgrimieron problemas de agenda para poder acudir la reunión. Leire Pajín se encargó de explicar, una a una, las gestiones y las misivas remitidas a las distintas administraciones implicadas. El 29 de enero se remitió la convocatoria, primero por fax y luego por correo certificado, y se avisó telefónicamente de la reunión de ayer. Tanto Vicente Rambla como los alcaldes de Alicante y Benidorm plantearon "cortésmente" problemas de agenda, delegaron su representación y se mostraron abiertos a "colaborar", matizó Pajín.

Sin embargo, el vicepresidente del Consell criticó mediante una nota de prensa que la reunión se convocara "con menos de 24 horas de antelación", y que los socialistas "sólo se acuerden de la Casa del Mediterráneo en campaña electoral". En el mismo sentido se manifestó el edil de Cultura de Alicante, Miguel Valor, que tildó de "oportunista esta idea, que es como el Guadiana, aparece y desaparece en función de la cita con las urnas".

El traslado de los trenes de cercanías a la antigua Estación de Murcia, previsto por las obras del soterramiento de la actual estación de Renfe, son "compatibles", según explicó el director de Patrimonio de Adif, Antonio Cabado, ya que se habilitarán andenes y vías fuera de la antigua estación, donde está previsto la obra de la futura Casa del Mediterráneo.