"Asumí todas las peticiones de los alcaldes"

La conselleira de Vivenda, Teresa Táboas (Ciudad de México, 1961), asegura que la ley de medidas urgentes en materia de vivienda, que el jueves aprobó la Xunta, es uno de los principales proyectos del Gobierno para la legislatura. En la entrevista, realizada en gallego, replica a los alcaldes que casi todas sus apreciaciones fueron consideradas.

Pregunta. Concluye un largo período de tramitación. ¿Llegó a pensar que las resistencias podrían con la ley?

Respuesta. No, no. Hubo momentos en los que tuvimos que buscar puntos de encuentro entre lo que se proponía y las alegaciones de distintos sectores, pero nunca pensamos que la ley no saldría adelante. Como dijo el presidente, éste es uno de los proyectos más importantes de la legislatura. Sin duda.

"No hay alegación alguna a la incompatibilidad de alcalde y promotor" "Las instituciones implicadas tendrán que resolver lo de Monte Porreiro"

"Lo sustancial era el 40% y reservar suelo para alquiler, y eso está en la ley" "Hemos cerrado el cronograma legislativo para estos cuatro años"

P. ¿Le molestaron las críticas de la federación de municipios?

R. No, porque asumí prácticamente todas las alegaciones de la Fegamp. Sobre todo había una en la que incidieron mucho. Nosotros proponíamos la prohibición de monetarizar el 50% del patrimonio municipal de suelo. Ellos pusieron objeciones y, al final, se dedicará preferentemente a vivienda de protección, bajo la responsabilidad de cada ayuntamiento. Entendíamos que era importante nuestra propuesta, porque nos encontramos con que los ayuntamientos no tenían suelo, y por mucho que quisiéramos hacer vivienda en alquiler para jóvenes, no había suelo municipal. Teníamos el informe del Consello de Contas de 2004 que critica la monetarización. Ellos creían que había que abrir una puerta a la libertad de poder vender, y así quedó.

P. ¿Qué le parecen las opiniones de los alcaldes sobre éste y los demás proyectos de Vivenda?

R. Bueno: las opiniones de ciertos alcaldes, porque son ciertos alcaldes, que pueden no estar a favor. Ya lo dijo el vicepresidente de la Xunta: estamos aquí para hacer cambios. Este es un Gobierno de cambio, y las propuestas tienen que ser ambiciosas, porque eso nos demanda la sociedad. No podemos seguir con lo que había. ¿Decreto de habitabilidad? Ya había uno, vacío de intención de mejorar la calidad de las viviendas. Sabíamos que había que cambiarlo, y que había que hacer una norma ambiciosa. Es importante hacer normas que mejoren la calidad. Y, sobre la Fegamp, me pregunto: Vigo también está en la federación, ¿no? Pues ya recoge la reserva del 40%. Hay gente que opina de distintas maneras.

P. También hay críticas de la federación de constructores.

R. Yo me pregunto por qué subieron tanto las viviendas en Galicia y por qué ahora no son capaces de venderlas, porque hasta ahora ninguna de nuestras leyes y normas está aún en vigor. Eso es demagogia y una falacia. Tendrán que explicar por qué dicen que los precios van a subir si ya subían antes, que no había normas de habitabilidad ni ley de vivienda. Es un verdadero drama para los sectores productivos de Galicia. Hay un sector que obtuvo beneficios especulativos y ahora, con ese sistema perverso, la gente se ve imposibilitada de consumir o de tener una vida más cómoda. Esos promotores demagógicos han llevado al límite a las familias y la gente ya no puede más.

P. ¿Se aceptaron más sugerencias de las que hubiese deseado?

R. No. Para mí lo sustancial eran dos cosas: las grandes ciudades, donde hay una demanda inmensa. Eso quedó tal cual: el 40%, que se reparte en distritos para promover la cohesión social. Y lo que también me preocupaba era el aprovechamiento no lucrativo, que se reserve un suelo que va a inscribir la consellería para viviendas de promoción en alquiler. Y esas dos cosas están en la ley.

P. Con la futura Lei de Vivenda y la entrada en vigor de la norma de habitabilidad, ¿se cierra un ciclo en la consellería?

R. Cuando entramos en el Gobierno marcamos una hoja de ruta de cuatro años, y el cronograma era muy ajustado. Llevamos dos años y medio y está aprobada una modificación de la ley que permite hacer planes sectoriales de suelo residencial, la norma del hábitat está aprobada, el anteproyecto de vivienda protegida también y queda la Ley de Vivenda, que ya pasó la fase de alegaciones. Con lo cual, a nivel legislativo, ya cerramos ese cronograma.

P. ¿Ha recibido la Ley de Vivenda alegaciones a la prohibición del ejercicio de la promoción inmobiliaria a los concejales en sus ayuntamientos?

R. Pues curiosamente, no, ninguna. Ni la confederación de empresarios ha alegado. No quiere decir que un promotor no se pueda presentar a unas elecciones, pero una vez elegido, en ese ayuntamiento no puede ejercer. Igual pasa en mi profesión de arquitecto. Los arquitectos municipales no pueden redactar ningún proyecto en su ayuntamiento. Son incompatibilidades básicas. Hemos hecho una encuesta sobre esta cuestión y el 90% de los gallegos está a favor de la prohibición.

P. La ley renuncia a obligar a alquilar los pisos vacíos, como hacen otras comunidades.

R. Porque la vía gallega es incentivar, dar ventajas y seguridad al propietario cuando pone la vivienda a disposición de la Xunta, para nuestro programa de vivienda en alquiler. La mayor parte de los propietarios no ponen los pisos en alquiler por miedo a los impagos, y la Xunta los garantiza.

P. Apenas ha legislado sobre suelo industrial.

R. No se legisló menos, es que para el suelo empresarial ya se recogía la posibilidad de hacer proyectos sectoriales. Esa figura urbanística nos permite ser muy ágiles en la puesta a disposición de suelo industrial. Entre ejecución y tramitación, estamos en 11,3 millones de metros cuadrados.

P. El 90% de las empresas en parques del norte de Portugal son gallegas.

R. Sí, pero tenemos un estudio y ninguna de ellas se asentó allí en los últimos dos años y medio. Son sobre todo de los años 80. Más que con suelo empresarial, tiene que ver con costes de producción que incentivan la deslocalización.

P. ¿Qué opina del conflicto de Monte Porreiro; piensa mediar, como piden los vecinos?

R. Tenemos un decreto de erradicación del chabolismo, y actuamos a petición de los ayuntamientos. Estamos pendientes de lo que pasa, pero nuestro papel fue firmar un convenio como otros que estamos firmando. Las administraciones implicadas tendrán que darle una respuesta.

P. ¿Puede Pontevedra cortarle el agua a las viviendas de los realojados, compradas por su consellería?

R. Eso ya son decisiones propias del gobierno de Pontevedra. Cada uno tiene sus competencias y yo lo respeto.

P. Decía que se cierra un ciclo en Vivenda. ¿Se siente con ganas de repetir otros cuatro años?, ¿es más dura la política de lo que esperaba?

R. Lo que quiero es finalizar este ciclo, que ya es motivo de alegría. Sería suficiente finalizar este cronograma y después, nunca se sabe. Sin duda, la política tiene momentos duros, pero también los tiene de gran alegría, en los que ves que merece la pena. Y éste es uno de ellos.