La burocracia que soportan las empresas es todavía excesiva, según el CTESC

Las medidas aprobadas por el Gobierno catalán en julio pasado con el objetivo de simplificar los trámites administrativos y la normativa que soportan las empresas se quedan cortas. Al menos, en el decreto que recoge parte de ellas.

Es la opinión del Consejo de Trabajo Económico y Social de Cataluña (CTESC), organismo que asesora con carácter consultivo a la Generalitat en materia socioeconómica y laboral y del que ya no forma parte la Administración.

El CTESC, que preside Mercè Sala, considera que el proyecto "no alcanza las expectativas generadas" ni en el acuerdo estratégico de competitividad pactado entre la Generalitat y los agentes sociales ni en el paquete de medidas aprobado en julio.

Las medidas que contiene el decreto son "una mínima reducción de trámites a los que hasta ahora estaban obligadas las empresas y particulares", critica el CES catalán, que de todos modos considera "positiva" la iniciativa del Gobierno catalán.

Enric Aloy, secretario general del Departamento de Innovación, Universidades y Empresa, se mostró "sorprendido" del dictamen precisamente por la presencia en el CTESC de los empresarios, que fueron consultados en la elaboración del decreto. Aloy añadió: "no se prevén cambios" en su contenido. El texto pasa hoy al consejo técnico de la Generalitat y más adelante irá a la comisión jurídica. Al igual que el Departamento de Economía, Aloy recordó que el decreto cuestionado recoge sólo una veintena de las 48 medidas adoptadas por la Administración para reducir la burocracia a las empresas. El resto va aparte. O suponen cambios de prácticas o leyes "que siguen su propio camino".