"No me he escondido"

Alrededor de la medianoche de ayer, el ex consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid compartía con su esposa una copa en el bar del lujoso hotel de la estación de esquí de Baqueira Beret (Lleida). "No he venido aquí para esconderme", confió a EL PAÍS en el transcurso de la velada. "La verdad es que tenía planeadas estas vacaciones desde octubre", recalcó.

El principal impulsor del caso de las sedaciones del hospital Severo Ochoa de Leganés confió que había llegado a Baqueira con su familia (su esposa y tres hijos) el pasado domingo, el día antes de que se conociese el fallo exculpatorio de la Audiencia de Madrid al doctor Montes y su equipo, acusados de 400 homicidios causados por sedaciones irregulares a enfermos en las urgencias del hospital.

"Envié una carta de protesta por el socavón a la ministra"

"Hablar esta semana no hubiera servido de nada"

Desde que se conociera el fallo que reconocía que no hubo mala praxis en la actuación del equipo de 15 médicos, el lunes pasado, este periódico intentó, día tras día, preguntar por el caso a Lamela, actual consejero de Transportes. "Está en viaje de trabajo", decían en su consejería. En realidad, estaba esquiando.

El cargo público no interrumpió su descanso en la estación invernal (dice que no ha tomado vacaciones desde hace 15 años) para hablar del fallo que acababa con tres años de falsas y graves acusaciones contra un equipo de médicos de urgencias de la sanidad pública madrileña. Pero sí hizo un paréntesis en sus vacaciones, según reconoció en el encuentro, para viajar a Madrid el martes. El motivo: un pequeño agujero en el techo de un túnel del metro en Sol provocado por las obras que realiza el Ministerio de Fomento sobre el suburbano. "Tuve que enviar una carta de protesta a la ministra", dijo. El suceso no causó victimas.

¿Y no hubiera sido entonces, el martes pasado durante su viaje relámpago a Madrid, un buen momento para encarar las preguntas sobre su actuación en el caso Leganés? "No hubiera servido de nada", respondió en Baqueira el ex consejero, que se había amparado minutos antes en la versión oficial defendida por la mañana por el vicepresidente regional, Ignacio González: la actuación del Ejecutivo en el caso Leganés fue "impecable". González también reveló que su consejero no había acudido al Consejo de Gobierno porque "estaba de vacaciones familiares". La cadena SER difundió a mediodía que Lamela estaba en Baqueira.

El alto cargo fue localizado por la noche en el hotel La Pleta de Baqueira-Beret, situado muy cerca de las residencias en las que suelen pasar sus vacaciones navideñas la familia real y el ex presidente del Gobierno, José María Aznar. Después de haber confirmado su presencia, el personal del hotel negó por activa y pasiva que el político madrileño estuviera entre sus clientes.

Pero sobre las nueve de la noche Lamela abandonó el hotel en un Mercedes gris. Le acompañaban su esposa y tres menores, sus hijos. Mientras cenaba en alguno de los muchos restaurantes de la zona, el equipo de recepcionistas reconoció con una sonrisa de complicidad que Lamela se alojaba en el hotel, aunque no se atrevieron a decir cuántos días llevaba en él o cuándo tenía previsto regresar a Madrid. "Lo sentimos, pero no podemos facilitar ninguna información de nuestros clientes", señaló el responsable de la recepción.

A su regreso, pasadas las once de la noche, Lamela se enfrentó a las preguntas del periodista y, más tarde, se sentó junto a su esposa en el bar cercano a la recepción del hotel. Hoy abandonará la estación, después de esquiar, si así lo desean sus tres hijos. El sábado le espera una cita con su agenda pública: la inauguración de unas cocheras.