El Ayuntamiento abre la investigación del 'caso Guateque'

La Operación Guateque vuelve al Ayuntamiento tras haber pasado varios meses secuestrada en los juzgados, y una vez levantado el secreto de sumario. Los expedientes de la supuesta red de cobros ilegales en la concesión de licencias municipales, serán analizados por la comisión especial que se constituirá hoy. Los representantes de todos los grupos políticos de la Corporación municipal y el alcalde Alberto Ruiz-Gallardón, se reunirán en la Junta de Portavoces para acordar y establecer las reglas del juego de esa comisión de investigación: composición, funcionamiento y régimen de sesiones. Pero ayer todos los grupos, que están de acuerdo en que la comisión empiece a funcionar antes de las Generales, adelantaron ya algunas de sus posturas.

El PSOE quiere que cada grupo pueda determinar las comparecencias

Para el PP "lo importante es ver qué ha pasado y sus responsables"

- Investigar sólo los sospechosos. Manuel Cobo, vicealcalde, consideró que deberían ser investigados sólo los "expedientes sospechosos, porque hay algunos de la legislatura pasada, o de la anterior...". Cobo dijo que la concejal de Urbanismo, Pilar Martínez, y la ex edil de Medio Ambiente Paz González comparecerán en la comisión siempre que los miembros de esta comisión "decidan qué personas pueden aportar mayor luz al caso". Y, por si acaso, lanzó una advertencia: "Hay otras personas que también han resultado afectadas por el sumario y que nosotros podemos pedir que comparezcan". Para Cobo, lo más importante es "ver qué ha pasado, quiénes son los responsables y, a partir de ahí, decidir qué personas pueden aportar mayor luz".

- Investigar a fondo. El PSOE, que es el que puede sacar mayor rédito político, pretende demostrar que "el caso Guateque ha destapado, no sólo una red de corrupción, sino un desgobierno", en palabras del concejal Pedro Sánchez. "Queremos que, cuando se decida el número de miembros que compondrán esa comisión, tengamos la representación suficiente, es decir, cuatro personas como en las comisiones ordinarias", apuntaba el portavoz socialista David Lucas. "Queremos que las reuniones estén espaciadas para poder estudiar los expedientes y preparar las intervenciones", agregaba. Y "queremos que estén obligados a comparecer todas las personas afectadas que pertenezcan al Ayuntamiento, y que cada grupo pueda determinar las comparecencias que quiera sin que esa decisión esté sometida a votación porque, en tal caso, siempre saldrían las que aceptase el PP que tiene mayoría". Son seguras las peticiones de comparecencia de las concejales de Urbanismo y de Medio Ambiente (en este caso también la anterior responsable: Paz González), y las de todos los directores generales y gerentes de las juntas de distrito por las que se extendía la trama.

- Concreto y breve. Desde Izquierda Unida, su portavoz, Ángel Pérez, se mostró partidario de esclarecer todo lo que sea necesario, pero apostó por una investigación "concreta y breve". Fuentes de IU aseguraron que su posición en la Junta de Portavoces será la de agilizar el procedimiento de manera que las reuniones se produzcan al menos dos veces por semana ("para que no se pierda el hilo") y para que los trabajos y las conclusiones de la comisión no se demoren más allá del verano. Las mismas fuentes aseguraron ser más partidarias de que la comisión estuviera formada por siete miembros y no por 12, como las comisiones ordinarias: cuatro del PP, dos del PSOE y uno de IU. "Por una simple cuestión de eficacia". Por último, aseguraron estar dispuestos a aceptar que la comisión detuviera sus sesiones durante los 15 días de campaña electoral que precederán a las elecciones de marzo.

Hoy sabremos en qué quedan todas estas intenciones y cómo funcionará la citada comisión.