Los profesores dan menos clases que en la OCDE y se sienten bien pagados
Las aulas están menos masificadas que en otros países, según la Fundación Bofill
Los maestros y los profesores de secundaria se sienten bien pagados. Un docente con más de 15 años de experiencia tiene un salario en torno a 30.000 euros al año. Casi la mitad de los profesores y maestros están "satisfechos" o "muy satisfechos" con su sueldo, según una encuesta a 4.598 docentes efectuada por la Fundación Jaume Bofill.
El 24% de los docentes del sector público son interinos
USTEC y UGT critican que se presente en vísperas del paro en los centros
El 25% está "insatisfecho" o "muy insatisfecho" y el resto ni una cosa ni otra. Aun así, la mayor parte cree que en el futuro sus posibilidades de aumentar el sueldo están limitadas porque no hay una carrera profesional. El informe destaca que los de primaria dan el 2,9% menos de horas de clase que la media de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE). Y los de secundaria, hasta el 12,4%. "No hay un país con menos horas de clase en la secundaria pública", señala el director del informe, Francesc Pedró. La jornada total, incluidas tutorías y trabajo fuera del centro es similar.
Los profesores de secundaria de Finlandia, Noruega y Reino Unido dan menos horas de clase que los de Cataluña y del resto de España. En primaria imparten menos horas en la República Checa, Luxemburgo y Finlandia. Aunque "el número de horas de clase no lo dice todo", opina Pedró.
Otra conclusión del informe es que las aulas están menos masificadas en Cataluña que en otros países. En los centros públicos de secundaria obligatoria, las ratios oscilan entre 10 y 14 alumnos por clase y en los de primaria entre 8 y 11. Como consecuencia, el coste de la hora de clase puede llegar a ser hasta el 30% mayor en Cataluña que la media de la OCDE, explica el director del informe.
Hay un elevado nivel de precariedad laboral. Hay en torno al 24% de docentes interinos en la pública y el 15% en la privada, más del doble que la media de la OCDE. El informe considera deficiente la forma de seleccionar al profesorado y defiende que se repiense su formación inicial. Otra propuesta es lograr mayor diferencia salarial entre los que empiezan y los docentes con experiencia. Se necesitan tanto incentivos económicos como no salariales, dice el informe.Los sindicatos reaccionaron ayer de forma crítica ante el documento de la Fundación Bofill sobre las condiciones de trabajo de los maestros y los profesores de secundaria. Varios de ellos consideran inoportuno y poco casual que el informe se conozca a pocos días del paro que han convocado en los centros educativos contra las propuestas anunciadas por la Generalitat con vistas a la futura ley de educación.
Los sindicatos, que han convocado una huelga para el 14 de febrero, piden que Educación retire el documento de bases para la futura ley de educación. Están en contra de la autonomía de los centros y de la evaluacion de colegios, institutos y docentes, y piden que se potencie el sector escolar público y que no se otorgue más poder a las direcciones de los centros. También están en contra de la posibilidad, que recoge el borrador presentado por Educación, de una gestión privada de centros propiedad de la Generalitat.
"Es demasiada casualidad, pero una parte de las recomendaciones del informe presentado ayer coinciden con lo que ha dicho que quiere hacer el Departamento de Educación", dijo la portavoz de USTEC, Rosa Cañadell. "Pero hay cosas a favor en el informe. Por ejemplo, que una mayoría de docentes están satisfechos con su trabajo en el aula y de cómo los valoran los alumnos", recalcó la portavoz de USTEC.
Según el portavoz de Educación de UGT, David Medina, el nuevo informe de la Bofill se hace público en una situación de polémica entre el Departamento de Educación y los trabajadores. "No es por azar", recalcó. "Esa sospecha", añadió Medina, "crece al comprobar que las conclusiones poco tienen que ver con los análisis de las cifras y sí con ciertas consignas ideológicas. Los datos que se aportan no son, de hecho, premisas para el canto en contra de la función pública que entonan estos señores. Tampoco sus números son todo lo claros que debieran. Las ratios son bajas, pero el número de alumnos por clase es de los mayores de Europa. Los sueldos iniciales del profesorado son altos en comparación con los europeos, pero los salarios finales -tras años de servicio- son comparativamente bajos. Esos datos se prestan a confusión y requieren ser explicados".
La secretaria de Enseñanza de CC OO, Montserrat Ros, dijo: "Es útil tener más cifras, pero en el informe falta la etapa de educación infantil de cero a tres años. No hay nada y los profesionales son los peor pagados, con sueldos de 800 euros al mes". Ros añadió: "No entro en si el informe es oportuno, pero creo que es una reflexión parcial que puede ser perturbadora". Xavier Massó, secretario de ASPEPC-SPS, afirmó: "Que las vacaciones sean más largas aquí es falso. Estan más compactadas y en el resto de Europa más repartidas. Aquí hay más atención a las familias y más tutorías".
Los docentes creen que los alumnos valoran su trabajo
La mayor parte de los encuestados creen que los alumnos valoran su trabajo en clase. Casi el 70% de los profesores creen que es "satisfactorio" o "muy satisfactorio". Sólo poco más del 10% piensa lo contrario, mientras que el resto de los encuestados no creen que su labor sea "satisfactoria" ni "insatisfactoria".
Los profesores y maestros también valoran su trabajo en el aula. En concreto, el 80% estima positiva su propia práctica docente en clase.
Buen horario, aunque con poca promoción profesional
Más del 70% de los docentes encuestados dicen que están "muy satisfechos" o "satisfechos" con su horario laboral, y sólo poco más del 10% está "muy insatisfecho" o "insatisfecho". Similares proporciones de respuestas se dan sobre el calendario laboral.
Pero la situación cambia cuando se habla de promoción profesional. Menos del 30% se muetra "satisfecho" o "muy satisfecho". Y el 30% contesta que no está "insatisfecho" o "muy insatisfecho" con este aspecto de su profesión.
Estabilidad laboral, pero lejos de su domicilio
Una de cal y otra de arena. Los profesores y maestros consultados en la encuesta resaltan como un factor positivo la estabilidad laboral de su trabajo. Casi el 75% de los encuestados destacan este factor como positivo. Pero sólo el 42% vive en el municipio donde trabaja. Y el 37,5% de ellos ni tan siquiera tienen su residencia en la comarca donde desarrollan su labor.
"No se entiende bien que mayoritariamente no vivan en el municipio donde trabajan", opina el director del informe.
Los de secundaria son los menos satisfechos
Los profesores de secundaria son los que menos satisfechos están, según se deriva de la encuesta. Trabajan con alumnos de 12 a 16 años en la etapa obligatoria. Sobre una escala de 4,10, la encuesta les da un nivel de satisfacción de su actividad en el aula de 2,90 puntos.
Los de primaria, en cambio, tienen un grado de satisfacción muy superior: 3,50. Las opiniones menos satisfactorias se dan en los centros públicos, "seguramente por la distinta composición del alumnado en las dos redes".
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