El ex alcalde de Ares, juzgado por oficiar una boda falsa

Oficiar una boda falsa puede suponerle al ex alcalde de Ares, José Manuel Cendán, del PP, una pena de ocho años de inhabilitación para ejercer un cargo público por un delito de prevaricación. Cendán, que perdió la alcaldía en mayo y es el líder local del PP en la oposición, se sentó ayer en el banquillo de los acusados de los juzgados ferrolanos acusado de un delito de prevaricación que se remonta a 2002.

Tras la pugna con su gemelo, se sentó en el banquillo por agredir al actual regidor

La Fiscalía sostiene que el 6 de abril de ese año, el ex regidor aresano casó a una pareja en este municipio del litoral coruñés sin el preceptivo expediente civil de matrimonio, pese a que fue advertido del error en repetidas ocasiones. Cendán alegó que desconocía los trámites administrativos y que se limitó a casar a los contrayentes con la ayuda de su secretaria, Montserrat Rodríguez, también acusada.

El matrimonio fue anulado días después por un tribunal ferrolano y el Ministerio Público tomó cartas en el asunto. El popular proclamó ayer su inocencia por desconocimiento y asegura que el BNG está detrás de la denuncia con la intención de desprestigiarlo políticamente. "Yo no sabía nada", aseguró ayer a este diario, "si no, no hubiera firmado. Haría el paripé, pero sin firmar. Fui inocentemente y a los novios no los conocía de nada, no los he vuelto a ver".

Cendán argumenta que la secretaria del juzgado de Paz de Ares, Margarita Piñeiro, compañera del concejal nacionalista Manuel Rodríguez Doval, fue quien denunció los hechos. La trabajadora fue despedida por Cendán y readmitida posteriormente por el nuevo alcalde.

"Doval utilizó a la mujer. Yo la quité y ahora la han vuelto a incorporar", señaló indignado. La Fiscalía pide para el ex regidor y para su secretaria una pena de ocho años y nueve meses de inhabilitación especial para el ejercicio de cargos públicos. El juicio quedó hoy visto para sentencia en la Sala de lo Penal número 2 de Ferrol.

Sin embargo, no es la primera vez que el ex alcalde de Ares tiene problemas con la Justicia. No hace mucho, el pasado 19 de diciembre, Manuel Cendán compareció en los tribunales ferrolanos junto a su hermano gemelo Luis para resolver por la vía judicial una trifulca familiar que los enfrentaba a ambos por la gestión del negocio familiar, el bar Os Nanos de Ares.

La rivalidad de estos dos gemelos no se detuvo en lazos de sangre y saltó a la esfera política en las pasadas elecciones municipales de 2007 para enfrentarse por el sillón de la alcaldía en una singular lucha fraticida desde las filas de dos formaciones políticas distintas. Manuel Cendán lideró al PP mientras su hermano Luis encabezó la lista de un partido independiente, Nueva Alianza, nacido de una escisión del PP con otros cuatro ediles rebeldes.

Los resultados electorales de mayo de 2007 dieron la victoria al PSdeG después de ocho años de mayoría popular. "Yo no salí alcalde por culpa de mi hermano", aseguró ayer el ex regidor. Manuel y Luis Cendán, que durante ocho años gobernaron Ares conjuntamente, el primero como regidor y el segundo como primer teniente de alcalde, siguen compartiendo asiento en la corporación pero ahora desde los bancos de la oposición en partidos distintos.

Luis Cendán obtuvo un único edil en los comicios, el mismo concejal que le faltó a su hermano gemelo Manuel, que obtuvo cinco, para conseguir la mayoría y seguir al frente del gobierno local de Ares.

El ex regidor popular tiene pendiente otra causa por presunta manipulación del censo electoral en 2003 que le dio la victoria en los comicios de ese año por un estrecho margen de votos. El ex alcalde también fue juzgado por agredir a un concejal socialista, Julio Iglesias Redondo -actual alcalde de la villa- y se enzarzó en una guerra con la Xunta a cuenta de la nueva casa consistorial, inaugurada en 2006 a pocos metros de la playa bajo sospecha de ilegalidad.

La Consellería de Política Territorial ordenó en su día paralizar una obra que presuntamente invadía zona verde. El departamento de la socialista María José Caride negocia ahora con el gobierno de Ares, también del PSOE, una modificación del Plan Xeral de Ordenación Municipal para legalizar definitivamente el consistorio.