"No se puede afrontar unas elecciones con tu partido en contra"

"No se puede hacer una campaña electoral en Barcelona teniendo a tu propio partido y tu gente en contra, y ese cálculo electoral ha tenido que ver en que se desencallara la cuestión del túnel". Esta reflexión la hacía ayer un estrecho colaborador del alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, después de que éste respirara tranquilo tras el anuncio de que el Adif adjudicará el túnel que cruzará el centro de la ciudad el viernes. Porque, en realidad, nadie del Gobierno municipal, empezando por el propio alcalde, daba crédito a que la adjudicación del túnel tuviera que ver con la llegada del AVE a la estación de Sants, que era lo que argumentaba el Ministerio de Fomento hasta el jueves.

"Es una decisión que me satisface. Es coherente porque el trazado fue aprobado hace tiempo. De él depende el desarrollo de la zona norte de la ciudad y que se convierta en un nuevo eje de centralidad y también depende de ese túnel poder duplicar la capacidad de la red de Cercanías que necesita no sólo Barcelona, sino su área metropolitana", señaló Hereu.

Gobierno en minoría

La adjudicación del túnel del AVE no tenía fecha, pero se daba por sentado que Adif lo resolvería el pasado octubre. No fue así por el descalabro de Cercanías a raíz de los socavones de las obras del AVE. Así las cosas, la adjudicación se fue aplazando. Desde entonces, el Gobierno en minoría de Hereu ha estado en vilo porque no sabía cuándo se iba a despejar la incógnita del túnel y la oposición, que, paradójicamente, es mayoritaria en el consistorio, le atacaba con fuerza redoblada por su silencio. Y, encima, con las elecciones generales en puertas. "No era nada conveniente mezclar la decisión del túnel con un proceso político. Me alegro de que finalmente el Gobierno haya optado por aclarar las cosas", comentaba ayer Hereu.

Para la Cámara de Comercio, el anuncio de la adjudicación del túnel es una buena noticia "porque permitirá avanzar, sin más dilaciones, en la línea de alta velocidad".

Una lectura radicalmente opuesta hicieron los tres grupos de la oposición: CiU, PP y ERC. El convergente Xavier Trias anunció que la adjudicación del túnel es algo "reversible". Una reversibilidad que, dijo, tendrá que ver con el resultado de las generales. Es decir, si CiU es necesaria para gobernar.