ETA vuelve a atacar a los políticos
La banda atenta con una bomba de cinco kilos contra una sede socialista en Balmaseda - Primer ataque dirigido a un partido desde el fin de la tregua
ETA dio en Nochebuena otro salto en su ofensiva terrorista. Tras los atentados contra las Fuerzas de Seguridad (mató a dos guardias civiles en Francia), un escolta y un juzgado, atacó por primera vez desde el fin de la tregua la sede de un partido. Una Casa del Pueblo del Partido Socialista de Euskadi en Balmaseda fue el objetivo de los terroristas, aunque los principales damnificados fueron una quincena de familias que tuvieron que pasar la noche fuera de sus casas. La bomba de cinco kilos de explosivos, estalló pasadas las 21 horas del lunes, prácticamente a la misma hora en que la televisión emitía el mensaje del Rey reclamando unidad contra ETA.
"Tengo la casa rajada". José Ramón, vecino del segundo piso de la calle La Estación de Balmaseda, rezumaba ayer indignación. "No sé si el edificio está más arriba o más abajo. Está claro que está movido". El inmueble, de más de 100 años, está junto a una de las dos Casas del Pueblo de Balmaseda. La sede socialista quedó dañada, pero la peor parte se la llevaron los edificios contiguos.
Los terroristas colocaron la bomba en una caseta situada en la parte trasera de los edificios. El artefacto es similar al que hace diez días voló el juzgado de Sestao. Por eso, todo apunta a que los autores fueron los dos liberados (a sueldo) del comando Vizcaya Jurdan Martitegi Lizaso y Arkaitz Goikoetxea Basabe, a quienes las Fuerzas de Seguridad identifican como los responsables de casi todos los atentados de ETA desde la ruptura del alto el fuego.
"Eran las 21.08". Nekane es la dueña del bar en el inmueble más afectado. Resopla por el frío y maldice su suerte. "Lo reformamos el 25 de octubre y mira ahora". Las ventanas están por lo suelos y la Ertzaintza sólo le ha dejado recoger las pertenencias esenciales por el riesgo de derrumbe. "Eran las ocho y media y teníamos el bar lleno y nos ordenaron desalojarlo". Luego vino el estruendo y la Nochebuena se convirtió en pesadilla. Ayer quedaban platos de marisco rodeados de cristales y escombros.
El Ayuntamiento (gobernado con el PNV con siete concejales, cuatro del PSE y dos independientes), condenó de forma rotunda del atentado. En la declaración estuvo presente el presidente del PNV, Iñigo Urkullu, quien también acudió al lugar del atentado, y el portavoz de la Ejecutiva del PSE, Rodolfo Ares, quien aseguró que los responsables del atentado "serán puestos a disposición de la justicia". A las siete de la tarde, varios cientos de personas se manifestaron frente al ayuntamiento contra del atentado. El Gobierno vasco afirmó que las acciones terroristas de ETA "dan asco".
Por otra parte, la localidad vizcaína de Getxo sufrió el lunes la violencia callejera. Unos encapuchados atacaron con cócteles mólotov tres sucursales bancarias y una oficina de seguros. En los ataques una mujer resultó afectada por inhalación de humo, según el Gobierno vasco.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.